operación Filibustero
Desmantelada una red internacional de droga con sede en Melilla
La operación se ha saldado con 24 detenciones en España, Holanda y Alemania
La Guardia Civil ha desmantelado una red internacional dedicada al narcotráfico con sede en Melilla y ramificaciones en distintas provincias españolas y países como Holanda y Alemania, que se ha saldado con la detención de 24 personas, imputadas otras siete e intervenidos más de 500 kilogramos de polen de hachís.
Según ha informado un portavoz de la Comandancia de Melilla, los 24 individuos detenidos en la denominada Operación «Filibustero» son 18 españoles, cinco marroquíes y un holandés, acusados de ser integrantes de «una organización criminal dedicada al tráfico de drogas desde Melilla donde se asentaba el grupo principal y líderes de la organización, a la península y varios países de Europa, entre los que destacan Holanda y Alemania», siendo la oficina de Europol la encargada de la coordinación de toda la información obtenida a raíz de la investigación.
Igualmente han resultado imputadas otras siete personas y cursadas requisitorias internacionales para la detención de otras dos, uno de nacionalidad española con residencia en Holanda y otra marroquí.
El portavoz policial ha indicado que la operación se inició a finales del pasado año 2014, al constatarse aprehensiones de droga en el puerto de Melilla en dobles fondos de vehículos muy bien elaborados, conocidos como vehículos mula», provistos de «mecanismos de control remoto para su apertura» y «un perfil determinado de los detenidos», ya que algunos de ellos de ellos viajaban en familia, con hijos de muy corta edad, para no levantar sospechas.
Así, ha subrayado que la organización criminal asentada en Melilla, altamente jerarquizada y con ramificaciones en otras provincias de nuestro país, además de Ámsterdam (Holanda), «donde realizaban los dobles fondos de vehículos», tomaban extremas medidas de seguridad en todos sus movimientos, sobre todo en el uso de telefonía móvil de última generación, y cambiaban las rutas de entrada del «hachís» en la península, «ante las continuas intervenciones de vehículos en nuestra ciudad», lo que les ocasionaba grandes pérdidas económicas, «desviando por ello la entrada hacia Ceuta, vía Algeciras y Tánger».
El grupo tenía movilidad e infraestructura principalmente en el norte y levante español, destacando Almería, Málaga, Algeciras, Valencia, y Bilbao, además de Ámsterdam (Holanda), «lugares donde se han desarrollado actuaciones e intervenciones de droga», ha indicado el portavoz de la Comandancia.
El grupo criminal obtenía financiación de otras modalidades delictivas para la compra de la droga, vehículos y el pago a los que la transportaban. De este modo, ha asegurado que esas modalidades descubiertas que cometían de forma continuada consistían en el «hackeo de máquinas recreativas», y otra de «defraudaciones y estafas a compañías de seguros», muy bien planificada y orquestada.
Hackeo de las máquinas «tragaperras»
Durante el transcurso de la investigación, tres de los componentes, entre los que se encuentran dos de sus líderes con residencia en Melilla, fueron detenidos a finales del pasado mes de octubre en Pamplona, por la Policía Foral de Navarra, «por estafa».
Esta estafa consistía en la utilización de artilugios como «la moneda, hilo y varillas», para obtener los premios que dispensan las máquinas recreativas «tragaperras», instaladas en locales de ocio, al sumar los créditos de la «ruleta», sin depositar las monedas correspondientes, «obteniendo con ellos cuantiosos beneficios». A raíz de su detención, tomaron nuevas precauciones para evitar ser detectados.
Abofado de Vizcaya
El portavoz de la Comandancia melillense ha señalado que fruto del exhaustivo análisis operativo, pudieron descubrir otra vía de financiación, «siendo esta novedosa», consistente en la estafa y engaño a compañías aseguradoras de automóviles mediante la provocación planificada de accidentes de tráfico, bien entre «vehículos de alquiler», «vehículos propios de la organización», o «combinados».
Para ello, ha explicado, la organización criminal hacía que los vehículos fuesen ocupados al completo y posteriormente reclamaban indemnizaciones por lesiones corporales a las compañías aseguradoras. El estudio de riesgo, como si de una empresa se tratase, «se hacía con las reservas de no reincidir en las compañías de seguros, lugares del accidente, centros de asistencia médica, o los vehículos siniestrados».
El portavoz policial ha detallado que el autor intelectual de esta modalidad delictiva es un abogado con residencia en la provincia de Vizcaya.
500 kilos de polen de hachís
La citada fuente ha admitido que en las fases de explotación, realizada por etapas, «dada la complejidad de la red», y finalizada en estos días con las últimas detenciones en Almería y Valencia y el levantamiento del secreto del sumario, han llevado a cabo diversos registros domiciliarios, intervenidos nueve vehículos, algunos de ellos de alta gama.
Asimismo han llevado a cabo la aprehensión más de 500 kilogramos de «polen de hachís», en diversas actuaciones, así como la intervención de abundante documentación, que está siendo analizada.
La investigación, dirigida por el Juzgado de Instrucción número 2 de Melilla, ha sido realizada por el Equipo de Delincuencia Organizada de la Comandancia de Melilla, con el apoyo de otros de la provincias donde se ha desarrollado.