Rosa Belmonte
La España que se da de tortas
Ayer en Madrid, Rivera parafraseó a Guerra. Dijo que si les dan fuerza para ser decisivos este país va a cambiar más en tres meses que en 30 años. Pero volvieron a 1971: Girauta agarró la guitarra y se puso a cantar por Serrat. «Soy cantor, soy embustero, me gusta el juego y el vino, tengo alma de marinero, qué le voy a hacer, si yo nací en el Mediterráneo». Podría ser la canción de un partido nacido en Barcelona. Quien quiera contar con los votos de Ciudadanos deberá afrontar en 100 días diez grandes reformas. Desde recuperar 2.800 millones de la amnistía fiscal del PP a firmar un pacto nacional para la educación. El candidato de Ciudadanos dijo también que los votantes deben elegir entre «la España que se da la mano o la que se da de tortas». ¿Y no habría una en la que no haya que tocarse?