Elecciones en Andalucía 2018
Pablo Casado: «Me da pena Susana Díaz, ya no está feliz, se le ha acabado la batería de campaña»
«No cuela. Sabemos que Ciudadanos pactará con Díaz como ha hecho durante tres años y medio, o poco después del pacto del abrazo de Sánchez y Rivera», ha dicho el presidente del Partido Popular en un acto en Adra de las elecciones andaluzas
El presidente del Partido Popular, Pablo Casado , ha valorado este martes el debate electoral celebrado el lunes por las elecciones andaluzas, manifestando que la candidata socialista, Susana Díaz , le da «pena» porque «ya no está feliz, se le ha acabado la batería de campaña».
«No va bien, ya no cuela, la gente sabe leer», ha dicho en declaraciones a los medios en Adra (Almería), donde también ha subrayado que al candidato de Ciudadanos, Juan Marín , se le recordó este lunes que ha estado «tres años y medio pactando con una administración que ahora llama corrupta».
Igualmente ha criticado a la candidata de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, que «sigue diciendo que no pactará con Susana Díaz y ahí está su partido pactando con el PSOE en Cádiz, en Zaragoza, Barcelona, Madrid, Vitoria. En todas las autonomías y en todas las ciudades».
«No cuela. Sabemos que Cs pactará con Díaz como ha hecho durante tres años y medio, o poco después del pacto del abrazo de Sánchez y Rivera».
Ha advertido que Rodríguez también lo hará en Andalucía si puede y ha preguntado a los ciudadanos si quieren un «gobierno socialista-comunista», señalando que Podemos fue a Venezuela a «asesorar» a sus actuales dirigentes.
«La única garantía de cambio es Juanma Moreno», ha sostenido sobre el candidato popular, apostillando que a éste lo respalda su gestión como secretario de Estado, y que es el único con propuestas como el BMI (bajada masiva de impuestos), acabar con las colas de los hospitales y los malos índices de educación, y para crear «empleo, prosperidad e inversiones».
Tras un paseo multitudinario por las calles de Adra, se ha referido también a cuestiones como la inmigración irregular, hablando de una «oleada» provocada por el «efecto llamada irresponsable» del Aquarius y el Open Arms , así como por la «demagogia» del Gobierno que es «aprovechada por las mafias para seguir explotando» a estas personas.
Frente a esto, ha defendido que España debe ser solidaria pero teniendo en cuenta que el «estado del bienestar no es ilimitado» y que es preciso defender las fronteras porque «no cabe todo el mundo» en el país, sino sólo aquellos que lleguen de forma reglada y con un contrato vinculado al mercado de trabajo.
Así, ha criticado al PSOE por su «cinismo» al decir que iba a acabar con las concertinas y las devoluciones en caliente y al mismo tiempo «estar expulsando a los inmigrantes de Ceuta y melilla a gritos y pidiendo una política migratoria en Marruecos».
Ha reclamado asimismo la llegada de la alta velocidad a Almería, un pacto nacional por el agua consensuado entre comunidades cedentes y receptoras, y que el Gobierno esté a la altura en la negociación de la política agraria común (PAC).
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