¿Qué orden han recibido los policías sevillanos para la Semana Santa?
La Seguridad es la gran obsesión de las autoridades, por lo que hay una instrucción categórica sobre los agentes
No es ninguna sorpresa que la seguridad durante la Semana Santa sea un dolor de cabeza permanente para las autoridades. Pese a los impactantes atentados de las últimas semanas en Londres o Estocolmo, no se teme tanto la posibilidad de un ataque como la psicosis sociológica y el efecto que puede provocar en las aglomeraciones.
El pánico colectivo puede hacer que cualquier incidencia menor se convierta en un serio problema. Para evitar generar ninguna alarma en este sentido, los agentes de orden público han recibido una singular instrucción desde los mandos: prohibido correr. Salvo situación de extrema necesidad, los policías deben evitar cualquier carrera que pueda interpretarse como una señal de alarma entre los espectadores de las cofradías. Incluso los desplazamientos más perentorios deberán realizarlos a ritmo sosegado.
Por otra parte, las fuerzas de seguridad están revisando los códigos que utilizan para comunicar incidencias por radio para encriptar las informaciones, de forma que el público no pueda estar al tanto de los altercados que se notifiquen. Con las «carreritas» de la madrugada del 2000 en el recuerdo, todo esfuerzo es poco y se cuidan hasta los más pequeños detalles para evitar sustos innecesarios.