Movimiento #DamosLaCara
Manuel Barbadillo: «Afrontamos la crisis con el saber que nos aportan casi 200 años de existencia»
El presidente de Bodegas Barbadillo destaca el impulso del ecommerce para paliar el cierre de la hostelería
Bodegas Barbadillo es otra de las compañías andaluzas que se ha sumado al movimiento #DamosLaCara , impulsado en toda España para mostrar el compromiso en la superación de la crisis sanitaria y económica. Fundada en 1.821 en Sanlúcar de Barrameda, es una de las diez empresas familiares más antiguas de España . La sexta generación está ya al mando de la bodega gaditana, que cumple una tradición centenaria en la producción de de las denominaciones Jerez-Xérès-Sherry, Brandy de Jerez, Vinagre de Jerez, Vinos de la Tierra de Cádiz y Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda. En está última Denominación de Origen, Barbadillo es líder con una cuota de existencias superior al 50%.
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Propietaria también de Bodega Pirineos, de la Denominación de Origen Somontano , y Bodegas y Viñedos Vega Real, en el corazón de la Ribera del Duero , el grupo Barbadillo tiene 212 empleados y alcanzó un negocio de 33,5 millones de euros en 2019 en los mercados de España, Estados Unidos y Benelux.
Barbadillo tiene una larga historia. ¿La crisis del Covid es una de las más duras que ha pasado?
Esta crisis del Covid-19 ha sido uno de los acontecimientos más difíciles que hemos tenido que pasar en Bodegas Barbadillo. Nos hemos visto afectados por el cierre del canal hostelería, que suponía el 40% de nuestro negocio, pero hemos mantenido las ventas en alimentación, lo cual es muy positivo. Además, hemos intentado compensarlo impulsando el «ecommerce». Somos una de las diez empresas familiares más antiguas de España y en 200 años nos ha dado tiempo de vivir muchas cosas, pero siempre hemos tenido como compañía un ADN pionero en hacer cosas nuevas y en adaptarnos a las nuevas circunstancias.
¿Cómo ha afectado la pandemia a la dinámica de la empresa? ¿Qué medidas extraordinarias ha tomado Barbadillo?
El inicio de esta crisis sanitaria coincidió con uno de los momentos más importantes del año para nuestra bodega: la preparación para la Feria de Abril. En producción, tuvo que paralizarse el embotellado del vino y, una vez analizada la situación, se tomó la decisión de reinventarse y adaptarse al momento. De esta manera, se ideó la campaña #AlumbradoEnElBalcón, mediante la cual se animaba a los sevillanos a celebrar la Feria en casa y se lanzó una edición limitada del pack del feriante con Manzanilla Solear. La iniciativa tuvo muy buena acogida, hasta el punto de que las existencias se acabaron en menos de una semana y el mismo día del lanzamiento, se colapsó la página web de la tienda online de Barbadillo.
El impulso del negocio ecommerce ha sido fundamental para Bodegas Barbadillo, que ha visto comprometido el 40% de sus ventas debido al cierre del canal hostelería. Bodegas Barbadillo, además, ha continuado con su habitual línea de colaboración con otras empresas del sector y, debido a las circunstancias excepcionales derivadas de la pandemia, ha acentuado su compromiso con los hosteleros, a los que tanto ha afectado esta crisis. Por ello ha realizado una donación a la Asociación de Hostelería de Sevilla de 6.000 botellas de Manzanilla Solear de 75 centilitros, el equivalente a los 1.000 packs del feriante; y ha participado en la iniciativa #FuerzaBar promovida por Heineken, donando 1.200 botellas de manzanilla Mil Pesetas.
Al operar en el mercado mundial, ¿cómo se ha adaptado a las diferentes coyunturas?
Aunque depende del tipo de mercado, los efectos de la pandemia a nivel internacional no han sido tan notables como en España. El comportamiento de nuestro tipo de cliente ha sido positivo, aunque sin grandes incrementos, tanto las ventas de la gran distribución como en las de la venta especializada por el crecimiento de la venta directa y on line. El mercado más castigado ha sido el estadounidense.
¿Cuáles son las fortalezas de una empresa familiar que la hacen más resistente ante coyunturas como la actual?
Sin duda, la constancia y la adaptación a una situación tan excepcional, puntual y delicada para poder retomar ahora la actividad con todo el saber y conocimiento que nos aportan los casi 200 años de existencia de la bodega. En este momento, debemos afrontar la recuperación bajo la responsabilidad de estar a la altura como empresa, y con el reto de adaptarnos al cambio con todas las herramientas que haya disponibles para salir de la crisis lo más reforzados posible.