EMPRESAS
Garrigues y el bufete Curtis Mallet-Prevost defenderán a los aceituneros españoles en EE.UU.
Agricultores e industrias contratan a Garrigues para defender sus intereses
El sector andaluz de la aceituna de mesa está preocupado ante las medidas que ha activado el Departamento de Comercio de Estados Unidos , que ya ha abierto dos investigaciones para determinar si las importaciones de España están incurriendo en competencia desleal y si España está recibiendo subsidios a este cultivo de forma injusta. Los dos grandes productores americanos (las empresas californianas Musco Family Olive y Bell-Carter Foods) también han pedido a la International Trade Comission (ITC) que estudie si los agricultores americanos han sufrido algún menoscabo económico por la competencia de la aceituna española. «No tienen razón, pero es un asunto que puede hacer mucho daño si se toman medidas cautelares y hay trabas a la entrada de aceitunas españolas», afirma Eduardo Martín, secretario general de Asaja Sevilla.
En este momento hay una unión total entre empresas envasadoras y agricultores , y tanto los ministerios de Agricultura y el de Industria, como la propia Comisión Europea están siguiendo el procedimiento. Agricultores e industria han puesto su defensa en manos de Garrigues , junto al bufete neoyorquino . «Si prosperara la denuncia de las empresas americanas, se crearía un precedente gravísimo que acabaría afectando a otros muchos cultivos», remarca el líder agrario.
Las investigaciones de EEUU se basan en una serie de solicitudes presentadas por la Coalición para el Comercio Justo de la Aceituna (integrada por las citadas Bell-Carter Foods y Musco Family Olive) el pasado 22 de junio, que sostienen que el sector ha importado cantidades con unos márgenes entre el 78 y el 223% . Una de las investigaciones determinará si la importación de la aceituna se está realizando por debajo del precio de mercado y por otro, si los productores españoles de aceitunas maduras están recibiendo de forma injusta los subsidios del Gobierno. De confirmarlo, el Departamento impondrá impuestos a las importaciones en la cuantía del «dumping» o de los subsidios recibidos injustamente, de existir, o en ambos casos.
Las importaciones de aceituna madura de España en 2016 están valoradas, según el Departamento de Comercio, en 62,2 millones de euros. «El lobby de agricultores de California siempre ha sido muy agresivo, ya lanzaron una campaña contra la naranja clementina española denunciando que estaba afectada por la plaga de la mosca, con lo cual dificultaron su comercio; en el caso del aceite y la aceituna cambian los criterios en los controles de calidad para dificultar la llegada de los productos», remarca Martín. Sin embargo, con la demanda de «dumping» han dado un paso más. «No hay ningún motivo legal, las aceituna de mesa no tiene ninguna subvención concreta a la producción y la exportación, y las ayudas de la PAC están pactadas en el marco de la Organización Mundial de Comercio para evitar este tipo de conflictos».
Esta reacción de los agricultores californianos ha llegado justo después de que la Interprofesional de la Aceituna haya liderado una inversión de ocho millones de euros en promoción en EEUU, en una campaña en la que ha participado el chef español José Andrés. La medida puede beneficiar a países como Egipto o Argentina.