ANÁLISIS
Francia hace «diplomacia económica» en Sevilla
El nuevo cónsul, Didier Maze, y el empresario Cristophe Sougey (que acaba de comprar la empresa alcalareña Arévalo), son el tándem hispalense del Quai D´Orsay
LA característica «diplomacia económica» orquestada por Francia desde hace décadas tendrá también su particular reflejo en Sevilla. El primer acicate es el carácter del nuevo cónsul galo, Didier Maze , que se ha marcado como objetivo estrechar relaciones empresariales con la ciudad. Y también será determinante el aterrizaje en Alcalá de Guadaíra de Cristophe Sougey , un hombre de negocios afincado en España desde 1987. A Sougey le han encomendado dirigir una delegación de la Cámara Franco-Española en Andalucía Occidental, una institución centenaria en cuyo consejo están los principales directivos de multinacionales francesas. A partir del próximo marzo una serie de actos económicos alentados por Francia se incorporarán a la nutrida agenda de la capital hispalense.
La realidad es que Cristophe Sougey tiene mimbres para entrar bien en la sociedad sevillana . Tras pasar por grupos financieros como Cetelem (en la que coincidió con José María Pacheco y Mariano Muñoz), en 2004 tomó el control de la firma Plimpton 322, una compañía de mudanzas y almacenaje de papeles a la que convirtió en una referencia en la custodia de documentos para grandes aseguradoras (tenía 20.000 metros cuadrados en Alcobendas donde conservaba pólizas, siniestros, demandas o peritaciones). En 2009 vendió Plimpton y hace un año y medio aterrizó en Sevilla para adquirir la firma alcalareña Arévalo Refrigeración Modular, una referencia en los muebles para pastelerías y panaderías de todo el mundo.
Ha sido una negociación larga con Manuel Pérez Arévalo , el venerable emprendedor sevillano que fundó esta firma hace medio siglo y que ha sido el artífice de su crecimiento (hoy vende sus vitrinas en 100 países). Arévalo es un grupo saneado y con el negocio perfectamente enfocado tanto en productos como en mercados, pero no existía un relevo generacional claro. Con la mediación de la consultora One to One , Sougey ha liderado la compra de Arévalo, representando a un conjunto de inversores franceses y españoles dispuestos a acrecentar la dimensión de esta pyme industrial.
El tándem del cónsul Didier Maze y Cristophe Sougey será la particular filial andaluza del Quai D´Orsay, el palacio del ministerio de exteriores francés desde donde se alienta su envidiada diplomacia económica.