Eugenio Molina: «En Coca-Cola no hicimos ERTEs y ya estamos al 90 por ciento de la producción»
El director del Área Sur de Coca Cola European Partners asegura que Andalucía rozará el lleno hotelero en agosto y que la hostelería ya está recuperada casi al 80 por ciento
El director del Área Sur de Coca-Cola European Partners, Eugenio Molina , tiene motivos para presumir de su compañía: han mantenido a sus 4.300 empleados a nivel nacional sin tener que recurrir a ningún ERTE y ahora han abanderado una campaña para reflotar la hostelería y animar al turismo .
¿Cómo han controlado esta crisis?
En nuestro caso debemos diferenciarla en dos etapas: cuando se declara el estado de alarma y cuando comienza la desescalada. Al principio nos encontramos únicamente con la clientela de la alimentación. Y ahí nos tuvimos que volcar porque el noventa por ciento de la hostelería había cerrado, exceptuando los restaurantes de comidas a domicilio. Así estuvimos hasta principios de mayo: centrados en la alimentación moderna. Buscamos la seguridad de nuestros empleados y en un plazo de tiempo muy corto les conseguimos los EPIs necesarios para retomar las calles. Y con el canal Horeca no dejamos de trabajar, pero todo se hacía desde casa. Estuvimos todo el tiempo en contacto con nuestros clientes, que en Andalucía son 50.000 mensuales. Eso sólo lo podemos sustentar con un equipo de más de 500 personas; 150 se dedican a la alimentación y el resto en la hostelería, ocio nocturno, etcétera. Con la desescalada rescatamos a todos nuestros equipos y comenzamos con las visitas presenciales. A día de hoy el mercado está en torno al 80 por ciento y creemos que en septiembre se llegará a la totalidad de la actividad.
¿Les preocupa que Andalucía pueda perder casi 14 millones de turistas?
Sí, muchísimo. Aunque somos más optimistas; manejamos datos que nos facilitan nuestros propios clientes, y el mes de agosto estará completo en reservas hoteleras en toda Andalucía. Se van a vender todas las plazas disponibles. Las cadenas nos dicen que en las zonas costeras se recuperará la normalidad a partir de la segunda quincena de julio, con un mes de agosto muy bueno y un mes de septiembre también positivo. Los centros de las ciudades y sus apartamentos turísticos son los que más van a sufrirlo. Si todo sigue como hasta ahora, puede ser un verano muy gratificante.
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¿Están todas sus plantas ya operativas?
Sí, aunque realmente está siendo una recuperación más rápida de lo que esperábamos. Ya hemos retornado a los tres turnos; es decir, al 90 por ciento de nuestra producción. Aunque también es cierto que en estas fechas solemos estar en el cien por cien. Y la planta de Málaga, que trabaja exclusivamente para el sector de la hostelería, ya está al 70 por ciento. Estamos preparándonos porque entendemos que el consumo va a repuntar.
Ahora que habla de Málaga, se anunció un posible ERTE que finalmente no se materializó. ¿Como quedó ese asunto?
La planta de álaga trabaja exclusivamente con el formato de vidrio retornable. Con la hostelería cerrada, la fábrica se paró; pero no hubo ERTE, sino que llegamos a unos acuerdos muy positivos para todas las partes en las que muchos trabajadores optaron por tener sus vacaciones y acordamos cerrar unos días. Todo eso ya concluyó y reiniciamos hace unas semanas. Podemos decir con total orgullo que la empresa no ha realizado ningún ERTE a nivel nacional. Decidimos que los empleados son lo primero para nosotros y tenemos mucho que agradecerles.
Han sacado una campaña denominada «Juntos por la hostelería».
Nuestra mayor preocupación es la recuperación del sector. Es verdad que tenemos una posición privilegiada porque nuestro método de llegada al mercado de la hostelería está basado en la cercanía. Visitamos semanalmente al cliente, que son cincuenta y dos veces al año, y eso te da un conocimiento y una confianza que a lo mejor no lo tienen las otras casas. Nos permite hacerles unos «trajes a su medida». No es lo mismo la reapertura de un local nocturno, que una terraza clásica. Podemos ofrecerles mesas, terrazas, promociones especiales, financiación o aplazamiento de la deuda. Hemos sacado una iniciativa que son los códigos QR, cuya plataforma les ha permitido digitalizar sus cartas de manera gratuita. O incluso clientes que necesitan que les ayudemos a que el público acuda a sus negocios, porque esta recuperación va a durar hasta diciembre. Estamos en un sector potente y hay que ayudarle. Es cierto que hay hábitos de consumo que están cambiando, pero no creemos que lleguen para quedarse. Confiamos en que la experiencia del bar sea irreemplazable.
Esta crisis ha ahondado aún más en una nueva era digital: pedidos a través de aplicaciones, reservas desde los smartphone, las cartas por códigos QR… ¿Está su compañía preparada para esta nueva vuelta de tuerca?
Ya teníamos mucha renovación hecha, porque es nuestra obligación. Tenemos una estrategia de digitalización potente: hemos invertido más de trescientos millones de euros y en los dos últimos años lo habíamos acelerado. Con lo cual, nos ha pillado con los deberes hechos. Esto nos ha facilitado poder trabajar desde casa. Pero nuestra relación con ellos es muy presencial y eso es complicado de reemplazar. La digitalización lo complementa, pero siempre conservando esa presencia y cercanía con el cliente, que es un modelo único en el mundo. Cuando salgo al mercado y voy con un comercial nuestro vestido de Coca-cola, me doy cuenta de cómo entra en el establecimiento: como uno más del negocio.
Hablemos del tema de la fábrica: ¿Cómo va la ampliación de la planta de La Rinconada?
A día de hoy ya es la planta más grande de Europa. La ampliación se encuentra en estos momentos al cincuenta por ciento. Las obras sólo estuvieron paradas ocho días porque no quedó más remedio durante el estado de alarma. Es una inversión de más de cincuenta millones de euros. Y estará terminada entre octubre y noviembre y la podremos disfrutar a partir de la próxima primavera. Esta ampliación se debe únicamente a que el mercado va bien. La hostelería y el turismo tiran mucho de Andalucía. Estamos muy orgullosos.
