Agricultura
Cómo hacer del alcornoque un árbol del gran producción
Un técnico sevillano lleva a la dehesa un manejo innovador que aumenta la productividad del alcornoque
Implantar en la dehesa un protocolo fitotécnico similar al que se usa en otros cultivos intensivos, con productos naturales y ecológicos, con el objetivo de convertir a la encina o al alcornoque en árboles de gran productividad. Esto hace que la bellota gane en peso, en tamaño y en calidad nutricional, y minimiza al mismo tiempo la caída prematura del fruto antes del inicio de la entrada de los cerdos ibéricos en la montanera.
Este es el proyecto en el que se ha embarcado el técnico agrícola sevillano Jared Jesús Rabanillo Rueda , que ha probado con éxito en la dehesa un manejo agronómico experimental, aplicando productos a base de aminoácidos, materia orgánica, algas marinas y azúcares que ya se vienen usando en otros cultivos intensivos (como cítricos, arroz o cereales).
Este proyecto, por el que el técnico sevillano ha resultado finalista en los premios Joven Agricultor 2018 , organizado por la patronal agraria Asaja, ha obtenido muy buenos resultados en campo. Los ensayos se han realizado sobre una decena de árboles escogidos al azar y con unas cargas medias de fruto. Además, las evaluaciones de la eficacia de la aplicación del producto se han realizado en diferentes estados de desarrollo de la bellota.
«Tan sólo 26 días después del tratamiento ya vemos los primeros resultados, pues se observan diferencias en el calibre y el peso de las bellotas de los árboles tratados respecto a los que no han recibido el producto», explica el técnico. La evaluación final «demuestra que la aplicación ha incrementado el peso de las bellotas hasta en un 22% , presentando un mayor agarre al árbol, ya que en los árboles no tratados se había desprendido el fruto en un gran porcentaje y había sido atacado por patógenos».
Igualmente, «se observa que la aplicación ha incrementado los valores nutricionales de la bellota al final del ciclo, ganando en valor energético, grasas, hidratos de carbono o proteínas». La evaluación de estos valores alimenticios ha sido ratificada por Laboratorios Innoagral, pertenecientes a la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla .
Se trata de «otra manera de entender la gestión de la dehesa, donde los árboles cuando se tratan es para evitar determinadas plagas u hongos, pero casi nunca con fines productivos. Este estudio, por contra, está enfocado a aumentar la productividad bellotera en las fincas así como la calidad de estos frutos, esencial para el engorde final del cerdo ibérico», declara el técnico.
La inversión estimada en productos para los propietarios de las dehesas interesados en intensificar la producción de bellota ronda «aproximadamente un euro por árbol» , a lo que habría que sumar la mano de obra necesaria para aplicar el tratamiento. Por ello, el estudio continúa con nuevos ensayos en campo buscando abaratar costes y facilitar el método de aplicación del producto, ya que «la dehesa andaluza presenta características orográficas muy dispares, y hay explotaciones en la sierra con una gran pendiente donde sería muy complejo la entrada de un tractor». Por ello, «la próxima semana vamos a probar la efectividad y el coste de la aplicación del producto por vía aérea», destaca Jared Jesús Rabanillo.