Caso ERE Andalucía
El caso ERE, una herencia maldita para Pedro Sánchez y Susana Díaz
El escándalo condicionó la política de una década en la que sucumbió el Gobierno monocolor más longevo de España
La sentencia del caso ERE en Andalucía | En directo
Sentencia caso ERE: Los expresidentes Chaves y Griñán, condenados en el caso de los ERE de Andalucía
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Domingo de Ramos de 2009 , el presidente andaluz Manuel Chaves anuncia que deja el cargo para asumir el Ministerio de Política Territorial junto a su leal escudero, el consejero Gaspar Zarrías. Estaba a punto de cumplir 19 años al frente de la Junta de Andalucía. Era 5 de abril. El último día de marzo, ABC había desvelado la existencia de la grabación del caso Mercasevilla , 74 minutos en los que dos directivos de la lonja proponían a unos empresarios dejar una mordida de 450.000 euros a cambio de concederles la explotación de una escuela de hostelería.
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El contenido de la cinta, que ya conocía la fiscal María José Segarra, hoy Fiscal General del Estado, fue puesto semanas después en conocimiento del juzgado de guardia por el PP. Las revelaciones de los directivos eran un compendio de corrupción que apuntaba a la Junta de Andalucía y a sus métodos de concesión de ayudas, cursos y Expedientes de Regulación de Empleo (ERE). Un sistema que favorecería la creación de una red clientelar en torno al partido que había gobernado en solitario Andalucía . Un sistema que los directivos condensaron en una frase lapidaria: «La Junta colabora con quien colabora».
Intrusos
«A mí me consiguen una subvención del tipo ERE y yo por razones obvias, al conseguidor tengo que pagarle una comisión...», comentaba a los empresarios el director de Mercasevilla Fernando Mellet. El entonces consejero del PP en la lonja, Beltrán Pérez, denunció que en ese ERE aparecía un «intruso» que cobraba su jubilación sin haber pertenecido nunca a la empresa . La juez Mercedes Alaya, que ya investigaba a la lonja, sospechó que podría ser una práctica en otros ERE concedidos por la Junta... y estaba en lo cierto.
En enero de 2011, Alaya abrió las diligencias para investigar el presunto fraude en ayudas públicas de la Consejería de Empleo . Se abría la causa que desveló el reparto, sin control, justificación y, a veces, sin solicitud, de 855 millones a más de 180 empresas. El dinero destinado a crear empleo en una de las comunidades con más paro de España se desviaba a pagar despidos de empresas presuntamente en crisis mediante ayudas gestionadas con opacidad administrativa que beneficiaron a empresarios con vínculos en las altas instancias de la Junta. Expedientes por los que además se pagaban sobrecomisiones a intermediarios y en los que aparecieron hasta 196 intrusos .
Chaves dejó la Junta en el albor del caso Mercasevilla; Griñán dimitió y nombró sucesora a Susana Díaz
La grabación de Mercasevilla había revelado la mayor trama de corrupción en Andalucía. Dos años después, José Antonio Griñán, sucesor de Manuel Chaves en la Presidencia, dimitía acosado por las macrosausas judiciales abiertas contra la Junta y designaba a Susana Díaz como sucesora.
La relación de aquella sorprendente salida de Chaves con la irrupción del caso Mercasevilla depende de la credibilidad que se dé a las casualidades. Como la de que Pedro Sánchez firmara con Pablo Iglesias un pacto de gobierno 48 horas después del 10-N, el mismo día en el que se anunciaba que el martes 19 de noviembre se dará a conocer la primera sentencia del caso ERE.
La trascendencia política del fallo es incuestionable, porque si la Gürtel se referenció como «la corrupción del PP», los ERE representan el modelo de «la corrupción del PSOE» . La sentencia del caso Gürtel señaló al PP como partícipe a título lucrativo. El caso ERE no juzga el lucro de los ex altos cargos procesados o la financiación ilegal del partido, pero sí la existencia de un sistema ideado y desarrollado para generar un «lucro electoral» al PSOE, que gobernó la Junta de Andalucía 36 años de forma ininterrumpida.
La trascendencia política del fallo va más allá del destino de los 21 ex altos cargos acusados. Durante una década, el caso ERE ha marcado el declive y caída del «régimen» socialista andaluz . Desde la salida de Chaves, el PSOE no repitió mayoría absoluta en su principal feudo electoral nacional. Necesitó de pactos y perdió el poder tras las elecciones anticipadas convocadas por Susana Díaz el 2 de diciembre pasado –¿cuánto tuvo que ver el proceso de los ERE en ese adelanto?–, que confirmaron el vuelco electoral con un Gobierno de PP y Cs, con el apoyo de Vox.
Tensión política y judicial
El caso ERE obligó a Chaves y a Griñan a dejar su escaño en el Congreso y, una vez imputados, a dimitir como militantes del PSOE, partido del que ambos fueron presidentes federales.
El proceso ha tensionado la vida política y judicial andaluza. Influyó en rupturas de gobiernos, adelantos electorales, condicionó pactos, convocó en 2012 la primera comisión de investigación en el Parlamento andaluz y hasta marcó la composición del Gobierno de la Junta con la caída en desgracia de consejeros o la elección del fiscal Emilio de Llera como consejero de Justicia, al que la opinión pública asignó un papel clave en el proceso que culminó con la salida de Mercedes Alaya del Juzgado de Instrucción 6 de Sevilla , su ascenso a la Audiencia y la llegada de la juez Núñez para hacerse cargo de las macrocausas.
Hasta la fecha elegida para dar a conocer el fallo de esta «pieza política» -el martes 19 de noviembre- ha sido motivo de polémica, por la duda de que se hubiera retrasado intencionadamente para no coincidir con la campaña de las elecciones generales del pasado domingo, extremo que desmiente el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Lorenzo del Río.
Nunca sabremos qué repercusiones habría tenido la sentencia en el resultado del 10-N. Pero tras el fallo habrá consecuencias políticas . En caso de condena, sobre todo si se atiende a la existencia del delito de malversación, la oposición a Pedro Sánchez reclamará al presidente del Gobierno en funciones y líder del PSOE, que dimita, reprochándole que llegó a la Moncloa tras una moción de censura contra Mariano Rajoy con el argumento de la corrupción, arrogándose el papel de líder de la regeneración democrática.
En febrero, Albert Rivera preguntó a Sánchez si en caso de condena en los ERE dimitiría «por haber robado a los parados de Andalucía». Rivera acaba de abandonar la nave política, pero el dirigente socialista está ahora inmerso en la difícil tarea de formar un singular Gobierno con Podemos. En caso de condena, la sentencia de los ERE será cuanto menos una incomodidad para Sánchez , además de una recurrente munición del PP contra el PSOE.
Tras la moción a Rajoy, Albert Rivera le preguntó a Sánchez si dimitiría con una condena en los ERE
La herida andaluza
Donde con más tensión se espera el fallo es en el PSOE andaluz, que pasó de negar el caso a señalarlo como un problema «de cuatro golfos» para terminar centrando su defensa en la honestidad de los expresidentes, a los que Susana Díaz no dudó en pedir la dimisión como diputados cuando tuvo que negociar la formación de su gobierno con Ciudadanos. «Pepe, Susana nos ha matado», le dijo Chaves a Griñán cuando el partido les enseñó a ambos el camino de salida, según cuenta el periodista Manuel Pérez Alcázar en su libro «Delfines y tiburones».
Susana Díaz es heredera de aquel socialismo en el que hizo su carrera política. Sucedió al exconsejero Viera en la secretaría provincial y a Griñán en la Presidencia de la Junta. Durante su mandato, la Junta jugó en los juzgados un papel bipolar de acusación y defensa, retrasó más de una investigación, culpó al PP de judicializar la política y atacó sin disimulo a la juez Alaya...
El discurso del PSOE andaluz es que fue el artífice de su propia regeneración. Si la sentencia es condenatoria, Sánchez hará que las miradas se desvíen al sur. Será otro argumento con el que debilitar a Díaz en las horas más bajas de la lideresa que le disputó su cargo en el partido. Llega el fallo cuando se escuchan los tambores que anuncian la batalla definitiva en la poderosa federación andaluza, donde el sanchismo prepara un ERE al susanismo .
Solo una sentencia exculpatoria a todos los niveles salvaría al PSOE de la pesada herencia de «su» corrupción.