La advertencia del Banco de España sobre los pagos limitados a mil euros
El gobierno limitó en julio de 2021 las operaciones en efectivo de un importe igual o superior a 1.000 euros
Qué cantidad de dinero en efectivo se puede llevar encima y cuánto se puede tener guardado en casa
El uso del dinero en efectivo se ha estabilizado el último año después del descenso generalizado durante el primer año de la pandemia según señala el Banco de España . Pero ya difícilmente se volverá a alcanzar los niveles de uso de dinero en metálico porque la tendencia es justamente la contraria.
Puesto que hoy en día casi todo se puede pagar de manera electrónica, bien mediante tarjeta bancaria, con el teléfono móvil o través de aplicaciones digitales como Bizum.
El estado también favorece este desuso del dinero en efectivo con medidas que tienen como objetivo la prevención y la lucha contra el fraude fiscal en vigor en España.
Así, e l gobierno limitó en julio de 2021 las operaciones en efectivo de un importe igual o superior a 1.000 euros o su contravalor en moneda extranjera, en el caso de los pagos en los que alguna de las partes actúe en calidad de empresario o profesional.
Los pagos en metálico están limitados a 1.000 euros cuando uno de los implicados es empresario o profesional. Puedes encontrar los detalles de la norma en este enlace 👇 https://t.co/C6ntHQOaHr #bdeEducaciónFinanciera #EducaciónFinanciera pic.twitter.com/vtjziol2hV
— Banco de España (@BancoDeEspana) October 5, 2021
Pagos en efectivo limitados a mil euros
El Banco de España avisa en su perfil de twitter los detalles de esta norma que está en vigor desde el pasado 11 de julio de 2021 que no permite:
«Desde el 11 de julio de 2021, no pueden pagarse en efectivo las operaciones de un importe igual o superior a 1.000 euros o su contravalor en moneda extranjera, en el caso de los pagos en los que alguna de las partes actúe en calidad de empresario o profesional. Este importe se eleva a 10.000 euros en el caso de que el pagador sea una persona física que justifique que no tiene su domicilio fiscal en España y no actúe en calidad de empresario o profesional», señala.
Además, concreta que la limitación se aplica a la operación y no al pago en efectivo en sí. Es decir, que si tenemos que pagar una operación de 1.100 euros y pagamos en efectivo 200, estaríamos incumpliendo la norma.
Esta limitación, en ningún caso, resulta aplicable a los pagos e ingresos realizados en entidades de crédito, en entidades de pago y a operaciones de cambio de moneda en efectivo realizados en establecimientos de cambio de moneda abiertos al público.
Según esta norma se consideran infractores tanto el pagador como el que recibe la cantidad en efectivo , y responden de forma solidaria de la sanción que llegara a producirse, que será del 25% de la cantidad pagada en efectivo de la operación que supere el importe de 1.000 euros.
No obstante, en el caso en el que una de las partes, en el plazo de tres meses tras el pago, denuncie ante la Agencia Estatal de la Administración Tributaria la operación realizada, su importe y la identidad de la otra parte interviniente, el denunciante quedará exonerado de responsabilidad.
Por último, debes tener en cuenta que los cheques al portador, así como cualquier otro medio de pago en el que no se identifique a los intervinientes, se consideran efectivo.
Por ello, el Banco de España aconseja conservar los justificantes de pago de aquellas operaciones que superen los límites establecidos, durante el plazo de 5 años desde la fecha de la operación, de forma que puedas acreditar cómo las pagaste.
El BCE considera desproporcionada esta medida
En marzo de 2022 el Banco Central Europeo (BCE ) ha calificado de «desproporcionada» la rebaja a 1.000 euros del limite de los pagos en efectivo en la que una parte actúe como profesional o empresa, según un dictamen de la institución, que advierte además del impacto «adverso e indeseable» en el estado de curso legal de los billetes en euros, según recogió la nota de Europa Press.
«El BCE considera desproporcionada la reducción del límite de los pagos en efectivo en operaciones en las que cualquiera de las partes actúa en calidad profesional o empresarial a 1.000», señala el banco central, explicando que este tope reduce significativamente la capacidad de los pagadores para utilizar billetes en euros y la libertad de los ciudadanos para elegir cómo pagar.