La mítica Winchester pone el punto de mira en los cartuchos sostenibles 'made in Spain'

La compañía, con base en el pequeño municipio segoviano de Santa María la Real de Nieva, ha dado un importante paso en su estrategia de crecimiento internacional tras haber firmado una alianza con el gigante americano Olin Winchester LLC, el principal fabricante y distribuidor de munición del mundo. Una operación con la que prevé producir este año más de 50 millones de cartuchos sostenibles por valor de 16 millones de euros y duplicar esta cifra el próximo año cuando ya se haya superado la crisis logística de materias primas.

«Nuestra munición contiene 0% de plástico, es biodegradable y compostable. Puede desaparecer por completo en un periodo de tres años, frente a los cerca de 550 que tardan los de plástico convencionales. Los cartuchos se degradan por acción bacteriana y vuelven a la naturaleza en forma de biomasa sirviendo de nutriente para microorganismos, hongos y algas», explica Manuel Galatas, director general de Bioammo, quien aclara que esta innovadora tecnología es el fruto de ocho años de investigación y está patentada en 52 países. Para sustituir el plástico utilizan biopolímeros de origen vegetal como caña de azúcar o batata.

«Pero además de la sostenibilidad, no podemos olvidar que han de tener las mismas características en cuanto a balística que cualquier otro cartucho», puntualiza Galatas, quien reconoce que están «muy satisfechos de haber logrado este acuerdo. Winchester es la mayor compañía mundial en fabricación y distribución de cartuchos de caza y tiro deportivo. Con esta alianza nos asociamos con el líder mundial, accedemos a su red comercial con más de 6.200 puntos de venta y nos aseguramos una elevada producción para los próximos cinco años», explica el director general de Bioammo.

Una alianza que contempla un acuerdo de distribución y otro de fabricación. El primero permitirá que la multinacional americana distribuya en exclusiva todos los productos de la pyme española en Estados Unidos, Canadá, Australia y Asia. El segundo contempla el suministro en exclusiva de componentes biocompostables de Bioammo para que Winchester los incluya en la fabricación de cartuchos comercializados bajo su propia marca. Bioammo, que ya cuenta con dos líneas de producción, señala que incorporará a quince trabajadores, que se sumarán a la plantilla de treinta empleados con los que la firma cuenta en la actualidad.

Para Enrique López-Pozas, presidente y fundador de esta pyme segoviana, «estos acuerdos confirman el gran interés que existe hacia nuestros productos, únicos en el mundo, en los mercados anglosajones y sobre todo reaseguran nuestra visión y creencia de que el uso de materiales compostables que eliminan totalmente los residuos plásticos son el futuro de la caza».

Prueba de ello es que estos cartuchos 100% biocompostables están siendo utilizados en veinticinco países, porque aúnan los valores medioambientales con una alta calidad balística.