Videoanálisis: «Debemos sentirnos orgullosos de la ampliación del Canal de Panamá»
El corresponsal de ABC en Miami analiza las consecuencias de la inauguración de la ampliación del Canal de Panamá
Entre vivas a Panamá, banderas ondeando bajo un cielo nuboso, fuegos artificiales y las notas del himno del país, el portacontenedores chino Cosco Shipping Panama estrenó ayer la mayor obra de ingeniería realizada hasta el momento.
La inauguración de la ampliación del Canal de Panamá, 102 años después de la construcción por Estados Unidos de esta vía de navegación que comunica el Atlántico y el Pacífico, se convirtió en una encendida demostración de orgullo nacional, a la que asistieron miles de personas, entre ellas una docena de jefes de estado y de gobierno.
"Estoy muy orgullosa de lo que hemos hecho", aseguraba a la televisión oficial del Canal una mujer de la ciudad de Colón que dijo haberse levantado a las tres de la mañana para acudir a la inauguración, aunque ni siquiera había dormido por "la emoción" que sentía, aseguraba.
Las numerosas dificultades técnicas y económicas que han jalonado la puesta en marcha de esta ambiciosa obra, presupuestado inicialmente en más de 5.000 millones de dólares , (4.425 millones de euros) se dejaron ayer a un lado para celebrar un acontecimiento histórico que marcará no solo el futuro de este país centroamericano, sino del comercio mundial. Atrás queda una década desde que la Autoridad del Canal de Panamá presentara al presidente Martín Torrijos la propuesta de ampliación, que se ha demorado cerca de dos años sobre el plazo previsto inicialmente y cuyos costes se han elevado 2.700 millones de euros por encima de lo presupuestado.
España ha tenido gran protagonismo en este proyecto, ya que la compañía Sacyr ha liderado el consorcio Grupo Unidos por el Canal (GUPC) encargado del principal proyecto, el tercer juego de esclusas que permite la nueva conexión entre uno y otro océano. A las 7:30 de la mañana, hora local (las 14:30 en España), el Cosco Shipping Panama, con capacidad para 9.400 contenedores, entró en la cámara baja de la esclusa Agua Clara, en la vertiente atlántica de la nueva infraestructura. Allí fue amarrada con enormes maromas a los remolcadores que situaron al buque para acceder a la cámara media y conducirlo por los cerca de 80 kilómetros que separan ambos océanos por el nuevo paso. Este barco chino en ruta desde Atenas a Corea del Sur, de casi 300 metros de eslora y 48,25 de manga, es del tipo neopanamax, la clase de embarcaciones para los que se ha realizado la ampliación.
Mayor capacidad
Gracias a este nuevo carril de navegación, se duplicará la capacidad del Canal y podrán transitar embarcaciones con capacidad para unos 13.000 contenedores (según la medida estándar TEU), frente a los 5.000 que podían transportarse hasta ahora.
Con las esclusas recién estrenadas, podrán circular de 10 a 12 buques neopanamax. En total, a partir de ahora podrán pasar por el Canal en torno a 40 buques al día. Según la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), ya cuentan con 168 reservas.
El capitán del Cosco Shipping Panama, el indio Jude Rodrigues, recibió una placa en recuerdo de este hito de manos del administrador del Canal, Jorge Quijano, mientras que representantes de la naviera china recibieron de Quijano y del presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, una moneda conmemorativa realizada con oro de 24 quilates. A su vez, Varela fue obsequiado por la compañía con una réplica a escala del barco.
El presidente panameño llamó a sus compatriotas a sentirse "orgullosos" por lo que consideró un "acontecimiento histórico para Panamá, la región y el mundo", al tiempo que agradeció la labor realizada por los trabajadores que han participado en este "monumental proyecto", por ser sus "grandes héroes". En la inauguración se guardó precisamente un minuto de silencio en homenaje a los empleados fallecidos durante las obras. Además, Varela garantizó que "los aportes del canal ampliado impacten la calidad de vida de la población, con transparencia, equidad y visión de estado".
Infraestructura clave
La importancia del Canal para la economía del país es crucial. Desde 1999, cuando Estados Unidos cedió su autoridad sobre la infraestructura a los panameños, les ha generado 10.000 millones de dólares en ingresos directos y en la actualidad se estima que la actividad económica en torno a ella aporta alrededor del 40% de todo su PIB. A escala global, la importancia de contar con un paso que evite rodear todo el continente americano para pasar entre el Atlántico y el Pacífico es también fundamental. De hecho, se calcula que por el Canal pasa el 6% del comercio marítimo mundial.
Para el administrador del Canal de Panamá, "esta ruta de tránsito es la punta del iceberg de un ambicioso plan destinado a convertir a Panamá en el centro logístico de las Américas, y representa una oportunidad significativa para los países de la región de mejorar sus infraestructuras, hacer crecer sus exportaciones y activar su crecimiento económico a la par con nuestro país", afirmó Jorge Quijano.
La inauguración de la ampliación se vio en parte ensombrecida por un accidente. Un remolcador de la Autoridad del Canal de Panamá chocó contra una lancha privada dentro de la vía navegable, con un resultado de 19 heridos, que fueron trasladados a hospitales públicos y privados en ocho ambulancias, si bien todos ellos estaban fuera de peligro, según informó la propia ACP.