Solo cuatro centrales de carbón se mantendrán en funcionamiento en España
Ayer dejaron de estar operativas siete plantas por las restricciones impuestas por la UE
Siete centrales térmicas de carbón dejaron ayer de estar operativas por las restricciones medioambientales impuestas hace tiempo por la Unión Europea. Se trata de las de Compostilla (León) y Andorra (Teruel), de Endesa; la de Velilla (Palencia) de Iberdrola; Narcea (Asturias), La Robla (Léon) y Meirama (A Coruña) de Naturgy; y Puente Nuevo (Córdoba) de Viesgo.
Estas centrales dejan de estar operativas porque sus propietarios consideran que no es viable económicamente invertir en modernos procesos para eliminar los gases que emiten . De todas formas, no están paradas técnicamente, ya que si fuera necesario tendrían que funcionar para no dejar desabastecido el sistema eléctrico.
En esta misma situación se encuentran las centrales de Lada (Asturias) de Iberdrola, las de As Pontes (A Coruña) y Litoral (Almería) de Endesa y la de Los Barrios (Cádiz) de Viesgo. En este caso, sus propietarios están esperando los permisos del Ministerio para la Transición Ecológica para su cierre definitivo .
Una vez que estas plantas térmicas reciban la autorización ministerial, tardarán entre tres y cinco años en ser desmanteladas . En la mayoría de los casos, sus propietarios tienen planes para levantar en esas localizaciones otras plantas renovables.
A partir de hoy, seguirán generando electricidad con carbón las dos plantas de EDP, Aboño 2 (Asturias) y Soto de Ribera 3 (Asturias), que se mantendrán en funcionamiento «mientras su competitividad en el mercado lo justifique». Ambos grupos cuentan con las mejoras ambientales exigidas, en las que la compañía ha invertido más de 200 millones de euros en los últimos años. En el caso de Aboño, además, es una instalación estratégica, pues garantiza el suministro de energía a la gran industria asentada en Asturias, según subrayan desde EDP.
Las otras dos centrales que seguirán funcionando son de Endesa: Carboneras (Almería) y Es Murterar (Mallorca), que solo mantiene activos dos de sus cuatro grupos.