Reino Unido y países emergentes y en reestructuración, destinos de la banca española
Brasil, México, Turquía y Polonia son algunos de los países en los que las multinacionales bancarias de nuestro país más han crecido en los últimos años
A la banca española se le reconoce en el conjunto del sistema financiero mundial dos fortalezas. Una, su modelo comercial de banca minorista , que ha situado a las entidades financieras españolas entre las más competitivas y rentables. La otra, su diversificación geográfica , sobre todo hacia mercados emergentes, que ha permitido a los bancos españoles con más presencia en el extranjero, básicamente el Santander y BBVA, capear la crisis en Europa y otras economías desarrolladas.
Si hay un destino por excelencia de la banca española, es Iberoamérica, donde las entidades españolas se han hecho muy fuertes. Banco Santander, por ejemplo, es uno de los principales grupos financieros de Brasil , que aporta a las cuentas del grupo 1.631 millones de euros anuales, el 19% de los beneficios totales de la entidad, solo por detrás de Reino Unido (21%) y por delante de España (12%). En el caso de BBVA, México es su primer mercado, al aportarle 1.915 millones al año, el 46,1% de sus ganancias. Es el destino que también ha elegido el Popular para iniciar su expansión internacional, mediante la compra de una participación en la entidad Bx+ , y el Sabadell, que ha iniciado operaciones allí por su cuenta .
Las entidades financieras han elegido así como destino internacional para su actividad mercados emergentes, con un nivel de bancarización más bajo y que, por tanto, ofrece grandes expectativas de crecimiento. Y no solo economías pujantes —pese a su debilidad actual— de Suramérica: el Santander, por ejemplo, ha definido Polonia como uno de sus diez mercados clave, y la gran apuesta de BBVA es ahora mismo Turquía , donde ha tomado el control del banco Garanti .
En todo caso, la reciente recesión de algunas de esas economías emergentes y la recuperación económica en el Viejo Continente han hecho que los bancos nacionales sigan apostando por mercados como el británico. La entidad presidida por Ana Botín es uno de los primeros bancos de Reino Unido y el Sabadell acaba de hacer su desembarco allí con la adquisición de TSB . El atractivo de la isla es el elevado volumen de negocio que genera ese país y que la banca española, por su modelo comercial, se mueve bien en mercados competitivos como el británico.
La última gran apuesta de las entidades nacionales parece ser Portugal , donde el Santander ha adquirido Banif y Bankinter ha comprado el negocio minorista de Barclays . En este caso, el motivo principal es sumar negocio en un mercado bancario en plena reestructuración y en el que por tanto se puede entrar a precios más bajos. Una situación que, en un futuro, se podría dar también en Italia .
