«El plan para Nissan era muy solvente, aún tiene futuro», subraya la ministra de Industria
Reyes Maroto dice que «en ese impulso que tenemos que dar hacia la movilidad sostenible y electrificacion de nuestro parque automovilístico, el Gobierno siempre ha defendido la convivencia de todas las tecnologías»
El pasado lunes Reyes Maroto abría su agenda semanal con la presentación del plan de automoción por parte del presidente Sánchez. El plan tiene un presupuesto de 3.750 millones de euros para impulsar el vehículo eléctrico, renovar el parque automovilístico y atraer inversiones.
– Este plan incluye reformar su fiscalidad a partir del año que viene, con afectación sobre los impuestos de matriculación y circulación. ¿Cómo debería ser esta reforma?
–Se tiene que hacer de forma conjunta con las CC.AA. y con las entidades locales, de ahí que la hayamos dejado abierta. Será fruto de la negociación. Nos hemos comprometido a avanzar y modernizar la fiscalidad del automóvil, pero debe haber debate para llegar a la mejor fiscalidad para el sector y que el país nos está demandando.
– ¿ Habrá con anterioridad algún cambio fiscal en el automóvil?
–Hemos incorporado ya dentro del eje de fiscalidad medidas muy concretas y muy demandadas por el sector porque llevaban muchos años estancados en la agenda, como las desgravaciones de innovación en proceso, que desarrollaremos en 2020, las amortizaciones de inversiones y la amplicación del volumen del transporte de mercancías relacionado con la reducción de emisiones.
– Tras anunciar ayudas a la compra para todas las tecnologías, ¿se «contaron los días» del diésel con demasiada precipitación?
–Hay que pensar en el futuro, no tanto recordar el pasado, comprometernos con en ese impulso que tenemos que dar hacia la movilidad sostenible y electrificacion de nuestro parque. El Gobierno siempre ha defendido la convivencia de todas las tecnologías mientras hacemos esa transición. Y ese compromiso es hoy mucho más cierto con un plan de 250 millones que permitirá renovar un parque ya tan antiguo.
– Y en ese impulso al futuro, ¿por qué Nissan desechó la propuesta del Gobierno para producir un modelo eléctrico en Barcelona y optó por clausurar las instalaciones?
–Habría que preguntárselo a ellos, porque efectivamente el plan de incentivos era muy solvente, donde el Estado compartía una parte de la inversión de nuevos modelos. La unidad de acción es clave también en Nissan, así estamos trabajando con Generalitat, ayuntamientos, sindicatos de Cataluña y comité de empresa. Vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para dar continuidad al sector de automoción en la provincia de Barcelona. Seguimos pensando que ese plan es un plan de futuro y seguimos con todas las actuaciones abiertas en las próximas semanas para revertir esa decisión y tener futuro para esas tres plantas.
– ¿Qué alternativas se abren ahora para los trabajadores de Nissan y las instalaciones?¿Puede haber una solución en el marco de la alianza Renault-Nissan?
–El lunes tuvimos la última reunión, como todas las semanas, un diálogo muy intenso con todos los agentes implicados, y se acordó buscar un aliado como solución a la situación de Nissan. Estamos tomando distintas medidas y creemos que la alianza en estos momentos puede ayudar. Seguimos también con una interlocución muy directa con Japón, les hemos trasladado las propuestas y la idea es mantener esta unidad de acción y mantener las capacidades productivas y el empleo. Todos salimos de las reuniones con deberes, y esa ruta de hoja común nos da confianza de que todos estamos unidos en esta lucha que no es solo de los trabajadores, es del conjunto de la sociedad española. Además, el plan de automoción abre una ventana de oportunidad para atraer inversiones a España no solo en Nissan si no en el conjunto de fabricantes en España.
– ¿Han demostrado interés otras compañías?
–Hay consenso sobre la importancia de que Nissan siga con nosotros, es una firma que lleva en nuestro país más de 40 años, forma parte del ecosistema automovilístico y, por lo tanto, en el corto plazo esa es nuestra lucha. Veremos cómo se va avanzando en el diálogo, espero constructivo, con Nissan.
— Por otra parte, esta semana es clave para Alcoa. Su cierre podría ser la muerte de la comarca.
—En esta semana clave para el futuro de A Mariña reafirmo mi apoyo a los trabajadores de Alcoa, saben que el Ministerio está de su lado. Si la empresa norteamericana no reconsidera su decisión, que deje paso a otro proyecto que garantice las capacidades productivas y el empleo en la comarca.