La pandemia dejará un desfase de 22.000 millones en la Seguridad Social este año
Escrivá ultima una reforma para que los autónomos coticen por sus ingresos reales

Al igual que en la economía, el impacto de la pandemia tendrá un efecto asolador en las cuentas de la Seguridad Social. El ministro José Luis Escrivá reconoció ayer que el déficit se disparará hasta el 2% del PIB, cuando un año antes el ... desfase se situaba en el 1,3%. Esto supone un desequilibrio de unos 22.000 millones de euros. Escrivá defendió que este duro impacto será «transitorio», pero lo cierto es que sus efectos se prolongará al menos tres años más si no se pone antes ningún remedio. Los datos proporcionados por Escrivá apuntan a que el déficit seguirá en 2023 en el 1,4%, aún por encima de la situación de partida.
Durante su intervención en la comisión del Pacto de Toledo, Escrivá explicó que el desfase se compensará este año con un a aportación extraordinaria del Estado que ascenderá a 14.500 millones, destinados a pagar la exoneración de cuotas en los ERTE, la prestación extraordinaria por autónomos, la prestación por incapacidad temporal por Covid y el ingreso mínimo vital. El ministro aseveró que el aumento del déficit se debe en buena parte al desplome del PIB, aunque también se explica por el recorte «significativo» que han sufrido los ingresos a lo largo de este año.
Más allá de la crisis generada por la pandemia, el ministro insistió en la urgencia de eliminar gastos impropios , que son «devastadores» para las pensiones, su solvencia y, en definitiva, para la confianza de la población en el sistema. Según sus cálculos, los gastos impropios serían del 1,6% del PIB (22.871 millones) en 2023, por lo que eliminación de estas partidas al Estado permitiría eliminar el déficit del sistema. Los llamado gastos impropios son los que soporta el sistema de pensiones aunque en realidad excedan la retribución a los pensionistas, como parte de las políticas no contributivas, las reducciones en la cotización como las tarifas planas, o la prestación cuidado de hijos.
Por otro lado, Escrivá avanzó que trabaja en una reforma del régimen de cotización del trabajador autónomo (el conocido como RETA) para que este colectivo pueda cotizar en función de sus ingresos reales, lo que permitiría rebajar su cuota por debajo del mínimo fijado actualmente a aquellos que menos facturan. El ministro calificó la cotización actual de «anómala» y la responsabilizó de las bajas pensiones de muchos autónomos. Según dijo, el Gobierno impulsará esta reforma en breve. «Es algo a lo que podemos responder de una forma relativamente inmediata», dijo.
Insistió también Escrivá en la necesidad de que el Pacto alumbre un acuerdo en base al cual legislaría después el Ministerio. Las propuestas del ministro pasan también por renovar el impulso a los planes colectivos de pensiones frente a los individuales vía fiscalidad y «potenciar la jubilación demorada» para acercar la edad efectiva de jubilación a la legal. Para ello, Escrivá reformulará los descuentos aplicados que en el caso de los perceptores que cotizaron por la base máxima.
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