La industria del autocuidado de la salud se reivindica con la pandemia
El Covid ha marcado un ejercicio atípico para el sector, en el que productos como mascarillas y geles se dispararon, pero otras categorías se hundieron
El sector del autocuidado está cumpliendo un papel muy importante en esta pandemia, en el que todos hemos tomado conciencia de la importancia de cuidarnos más y mejor. Se trata de una industria que fabrica productos para dar calidad de vida a las personas. Incluye medicamentos sin receta, plantas medicinales, cuidado personal, cosmética y complementos alimenticios, entre muchos otros. «Están pensados para que se puedan usar sin necesitar consejos y ayudan a que la calidad de vida sea mejor. Quien se cuida tarda más en ser paciente», explica Jaume Pey, director general de la Asociación para el Autocuidado de la Salud (Anefp).
Noticias relacionadas
En los últimos doce meses (con cifras cerradas en octubre) facturaron 6.700 millones de euros. «Este valor incluye el efecto covid, que supone unos 700 millones más que lo habitual , ya que algunas categorías han tenido un crecimiento importante», añade. Si quitamos este excedente, el crecimiento en 2019 rondó el 2,5% cuando en años anteriores fue de 3-4%. «En el peridodo 2012-2017 llegamos a crecer un 7% pero el ritmo de crecimiento ha sido similar en los últimos años aunque el comportamiento del sector depende mucho de la época del año», puntualiza Jaume Pey.
Relación estrecha
El 90% de todos estos productos se venden en la farmacia, aunque se pueden encontrar en otros establecimientos. Sin embargo, «hay que tener en cuenta que contamos con una red de 22.000 farmacias, presentes en cualquier rincón del país. En algunos casos hablamos de productos de cierta complejidad y a las personas les da seguridad el consejo que les pueda dar un farmacéutico», reconoce Pey.
A su vez, para los establecimientos farmaceúticos representan el 30% de su facturación total, siendo «una categoría muy importante, y en la que más ejercen su función de farmacéutico» los profesionales de este actividad, resalta el director general de Anefp. Estamos hablando de que existen en el mercado un total de más de 75.000 productos en este sector .
Desde esta asociación reconocen que ha sido un año muy extraño para el sector, en donde artículos como la mascarilla o los analgésicos «han explosionado». Pero a su vez ha habido otras categorías que se han hundido, como todo lo referente al aparato respiratorio, tos y resfriado clásico. «Estos productos han caído de forma importante», indica Jaume Pey, ya que con las mascarillas las personas han estado más protegidos frente a otros virus y la pandemia ha sido la protagonista este invierno.
Se han incorporado además nuevos hábitos de vida, como los inductores del sueño, cuyo consumo también ha aumentado. «Algunas de las novedades de ahora se quedarán con el paso del tiempo, como los geles hidroalcohólicos o las mascarillas», cree Pey. Pero en líneas generales «aunque hemos tenido cifras bastante buenas, la historia ha sido muy desigual», concreta.
Si miramos para el resto de los países de nuestro entorno, el autocuidado es una tendencia el alza, pero en nuestro país vamos algo por detrás que el norte de Europa. «En España los medicamentos sin receta representan el 7% del total de medicamentos vendidos mientras que la media europea se sitúa en el 12%». Desde Anefp recuerdan que al utilizar estos productos «ayudamos a dar sostenibilidad al sistema sanitario. Por un lado consumimos menos recursos públicos y por otro asumimos costes».
Calidad y control
Detrás del sector del autocuidado se encuentran sobre todo empresas de raíz farmacéutica. «Hablamos de empresas que se preocupan mucho por la calidad y el control científico», señala Pey. Además, por detrás de muchos de estos productos hay innovación. «Se van creando categorías nuevas e incorporamos siempre formas de innovación que mejoren su uso», añade. El sector está saneado aunque se ha visto afectado por las restricciones de movilidad. «La ventaja es que estamos hablando de un sector muy diversificado. No ha tenido caídas importantes que hayan amenazado su existencia», apunta la asociación.
Más autocuidado es sinónimo de más calidad de vida, apuntan desde esta industria, y por eso reivindican su naturaleza estratégica para el país.
