El incremento del SMI hasta 1.000 euros pondría en riesgo entre 85.000 y 135.000 puestos de trabajo

Más de la mitad de la destrucción del empleo recaería en hostelería y comercio

La ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz EFE

R. S

La subida del salario mínimo interprofesional tendría un impacto negativo en el empleo, afectando de forma más pronunciada a los de los sectores más golpeados por la crisis generada por la pandemia, y especialmente en los jóvenes y trabajadores con menor cualificación.

Se estima que un incremento del 5’3% del SMI el próximo año tendría una incidencia negativa en el empleo de entre 85.000 y 135.000 puestos de trabajo en 2021 y 2022 entre los que desaparecerían y los que dejarían de crearse debido a la dificultad para para hacer frente al encarecimiento salarial, según el estudio realizado por Randstad Research con la colaboración de Cepyme.

Además serían la hostelería y comercio los más afectados por la medida, « hasta un 52% de esta destrucción de empleo podría concentrarse en los dos sectores », con especial incidencia en las pymes. Por lo que entre 2021 y 2022 habrá que sumarle más pérdidas al nivel de ocupación de estos colectivos , que ya intentan hacer frente a los cientos de miles de empleos perdidos durante esta crisis y a las pérdidas a las que se enfrenta el sector, hostelería este año ha tenido una reducción del 50% de su facturación y acumula pérdidas de alrededor de 67.000 millones de euros, según Hostelería de España.

Entre los empleos perdidos y los que se ocultan bajo los ERTES el 2020 podría cerrar con más de un millón de empleos menos que en enero, desde Cepyme consideran importante recordar que «esta subida del SMI se plantea en un momento muy complicado para la economía española y en una situación extremadamente crítica para muchas empresas, especialmente pymes».

El incremento del SMI es «competencia exclusivamente del Gobierno, previa consulta con los agentes sociales, y que, como se recoge en el artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores, deberán tenerse en cuenta factores como la evolución del IPC -que esté año es negativa, la productividad media nacional, y la situación económica y del empleo», señalan desde Cepyme.

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