De Guindos: «La seguridad jurídica es fundamental para el mercado del alquiler»
El vicepresidente del Banco Central Europeo ha recordado en pleno debate por la ley de vivienda que los mercados donde existe mayor oferta de alquiler y moderación de precios son aquellos con «un marco jurídico garantista»
En pleno debate sobre la ley de vivienda en España, con el ala morada del Gobierno planteando distintas medidas para intervenir los arrendamientos, el vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE) Luis de Guindos ha considerado fundamental «la seguridad jurídica para el desarrollo del mercado del alquiler». Esto, tras recordar que que los mercados donde existe mayor oferta de alquiler y moderación de precios son aquellos con «un marco jurídico garantista», donde los oferentes tengas certidumbres para poner sus inmuebles en el mercado, con el efecto de un aumento de la oferta y ,por tanto, de la bajada de los precios.
«A veces se piensa mucho en fórmulas fiscales o no fiscales, pero mi opinión personal es que la garantía de un marco jurídico estable y razonable y que favorezca la oferta de alquiler es básico pata contar con un mercado de vivienda en alquiler amplio y con precios razonables», ha abundado el ex ministro de Economía español, durante un encuentro organizado por la Asociación de Propietarios de Viviendas en Alquiler (Asval) junto con Europa Press.
Así, De Guindos también ha señalado la importancia de disponer en Europa de un mercado de vivienda asequible de cara a la creciente movilidad de mano de obra entre países, que están acelerando la pandemia y la digitalización.
De esta manera, también se ha recordado el difícil año para el sector inmobiliario con una media de caída del 50% en las compraventas en toda Europa. Sin embargo, De Guindos ha señalado que esta crisis «no tiene nada que ver con la anterior», aunque advirtió de que estos descensos, suelen preceder a bajadas de precios, como así se ha reflejado en la cotización de fondos y socimis.
De cara al futuro próximo, el vicepresidente del BCE considera que la contribución del sector inmobiliario debe ser «no amplificar los efectos de la crisis», porque si hubiera un derrumbe inmobiliario , sería muy negativo desde el punto de vista del efecto riqueza, desde el impacto sobre los créditos con garantías inmobiliarias, y afectaría a la solvencia del los bancos y del sector no bancario.