El Gobierno prevé ante la UE la mayor recesión en 75 años
El Ejecutivo presenta a Bruselas unas estimaciones en la línea del Banco de España
El Gobierno envió ayer a Bruselas el Programa de Estabilidad más duro que se recuerda desde la crisis. Las cifras se conocerán hoy, pero fuentes del Ejecutivo aseguran que el escenario contemplado es similar al realizado por el Banco de España -que en su hipótesis central preveía una caída del 8,7% este año- o el FMI -un 8% de desplome-, además de un considerable aumento del déficit público -el Banco de España auguraba un 8,9% del PIB de boquete y el FMI, un 9,5%-. A ello se le suma el notable incremento de deuda pública que incluirá, probablemente mayor en 2021 que en 2020. Es decir, incluirá la mayor caída del PIB, al menos, desde 1945 cuando la renta per cápita cayó un 8,66%, según la serie histórica del profesor de la Universidad Carlos III, Leandro Prados de la Escosura.
La propia ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ya tildó de «obsoletas» las previsiones realizadas hace dos meses, un periodo de tiempo en el que han ocurrido más acontecimientos que en alguna década. El Ejecutivo preveía un crecimiento del 1,6% este año, del 1,5% en 2021, que se elevaría al 1,6% en 2022 y al 1,7% en 2023, mientras que la tasa de paro pasaba del 13,6% este año al 13% en 2021 y acabará en el 12,3% en 2023. Todo ello con un déficit del 1,8% este año que en 2022 era del 0,9% mientras que la deuda pública bajaba al 94,6% este año y al 89,8% en 2022.
Un escenario que ha saltado por los aires ante la crisis del coronavirus. «Va a haber una caida muy importante con una duda de cómo se va a producir la recuperación , la famosa V y va a haber un pico de recuperación importante», aseguró ayer mismo la ministra María Jesús Montero, en la Comisión de Hacienda en el Congreso de los Diputados.
Si bien el Ejecutivo sigue defendiendo que la recuperación tendrá forma de «V», la tesis más extendida entre los organismos es que tendrá la forma del logo de Nike , es decir, una caída fulminante este año con una recuperación escalonada, de forma que a finales de 2021 no habremos recuperado el nivel de PIB de 2019. Así lo ve el FMI , que pronostica un crecimiento del 4,3% en 2021. El Banco de España tampoco cree que se vaya a recuperar todo el PIB el año que viene. BBVA Research augura una caída del 8% en 2020 y un rebote del 5,7% en 2021. Con estas estimaciones, 2020 acabará con 113.000 millones menos de actividad que 2019, una brecha que seguirá existiendo con 32.000 millones menos en 2021.
«Nuestras previsiones no intentan ser optimistas ni pesimistas sino hacer un promedio de lo que se está haciendo en los organismos internacionales», apuntó Montero ayer. Precisamente, las cuentas públicas serán el otro capítulo que sufrirá un mayor varapalo en las previsiones que el Ejecutivo remitirá a Bruselas, con una deuda pública por encima del 100% del PIB este año y un déficit disparado.
Ello se debe al considerable aumento de receptores de prestaciones por desempleo, ante la destrucción de ocupación, sí, pero también por el número de ocupados afectados por un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) , además de los autónomos que han solicitado la prestación por cese de actividad. Esta será la partida que más se resentirá, lo que unido a un desplome de la recaudación que el Consejo General de Economistas estimó en 40.000 millones menos, dispararán el déficit a sus mayores niveles desde la crisis de 2008.
Escenario a peor
El escenario se ha movido tras conocerse la monumental caída del PIB durante el primer trimestre . Tras el dato de PIB trimestral de ayer, el Consejo General de Economistas recortó a la baja sus propias estimaciones, que eran del -4%. «Prevemos que el PIB se contraiga en torno al 10,8% en 2020 y la tasa de paro se sitúe entre el 21-22%, con una reducción en 2021 hasta el 17%», señalaron. El FMI calculaba que se iría al 20,8% en 2020 y al 17,5% en 2021.
En el Ministerio de Economía han estado siguiendo hasta última hora los indicadores disponibles, teniendo en cuenta las dificultades del INE, que ha alterado su mecánica de trabajo para asegurar estadísticas como la EPA o la contabilidad nacional trimestral, que ayer avisó podría estar sometida a profundas revisiones en el futuro . Con esta incertidumbre, la otra duda serán las medidas que incluya el Ejecutivo en sus planes para este año, con la intención de aprobar unos Presupuestos Generales del Estado para 2021 que son una incógnita.