El Gobierno estudia cubrir parte del riesgo de futuras pandemias

La patronal ha enviado a la Dirección General de Seguros, dependiente de la vicepresidencia de Asuntos Económicos, una estructura de aseguramiento por capas para repartir los riesgos, según revelan fuentes del sector. Por ejemplo, que ante determinadas incidencias en empresas que cuenten con pólizas en vigor, la responsabilidad de los pagos se reparta entre varios actores. Las intenciones son las siguientes. En primer lugar, establecer una franquicia que deberá pagar el asegurado , es decir, que habría un mínimo que debería abonar el cliente cuando surja una situación como la de esta pandemia. En segundo lugar, la empresa de seguros pagaría otra parte de la indemnización que resulte. En tercer lugar sería donde aparecería la colaboración público-privada.

El esquema planteado por el gremio propone que el Estado se haga cargo de una parte del pago a la persona/compañía damnificada, como ocurre por ejemplo con el Consorcio de Compensación de Seguros, que se hace responsable en el caso de catástrofes naturales. Ya pasando más a escala supranacional, la intención del sector es que la Unión Europea también participe en las coberturas . Es decir, que el Estado español se haga cargo de una parte del riesgo y las instituciones comunitarias de otra; una última capa, en suma, que compatibilice ambas instancias públicas y no sea excluyente.

La respuesta del Gobierno no se ha hecho esperar. Según ha confirmado ABC, la Dirección General de Seguros ha recibido de buen grado el esquema planteado por Unespa . Estima oportuno explorar esta posibilidad, aunque con matices. El Ejecutivo solo ha planteado revisar esta fórmula para aplicarla a dos seguros en concreto: el de cancelación de eventos y el de interrupción de negocio. En el primer caso se trata de un tipo de póliza que no tiene demasiada aceptación en España pero que, de aprobarse esta medida, podría experimentar una mayor demanda. En el segundo supuesto sí cuenta con mayor aceptación, aunque hasta ahora se ciñe a cubrir solamente los daños materiales directos .

Más allá de la intención a nivel nacional, esto se trata de una iniciativa que proviene de Europa. Cada Estado miembro está explorando la fórmula para que el ámbito público asuma parte de la responsabilidad. Y desde el sector confían en que llegue a buen puerto a escala comunitaria, para repartir los riesgos entre instancias.