Gimeno lucha por cerrar un gran pacto de negocio y un relevo ordenado en la presidencia
Las hermanas Álvarez, confiadas en la destitución de su primo en siete días
¿Fumata blanca hasta la Junta de accionistas de finales de agosto? ¿O destituación del presidente actual en unos siete días de forma fulminante en un consejo extraordinario? ¿Y una solución intermedia? El caso es que la crisis interna en la lucha por el control de El Corte Inglés sigue en todo su esplendor y las posiciones aún divididas. O al menos eso creen las fuentes consultadas por este periódico, si bien, apuntan, podría haber aflorado una nueva postura más conciliadora dentro del núcleo duro de la compañía que estaría de acuerdo en una transición más ordenada -y menos dramática, que evitara dañar la imagen corporativa del grupo considerado Marca España- de cara al relevo en la presidencia.
Acuerdo ante los accionistas
Así, según ha podido saber ABC de fuentes de su entorno, el aún presidente del grupo de grandes almacenes, Dimas Gimeno, mantiene su intención de acercar posiciones con el resto de consejeros con el objetivo de cerrar un gran pacto de futuro para El Corte Inglés con el que acudir ante sus accionistas el próximo 26 de agosto.
Ese gran pacto también incluiría la opción de su sustitución si fuera necesario. Pero ni de forma fulminante, ni mucho menos inminente. De hecho, si bien Gimeno no tira la toalla y está dispuesto a acabar su mandato a dos años vista al frente del grupo de grandes almacenes -sin funciones ejecutivas desde octubre del año pasado-, podría encajar que los accionistas decidieran, durante el trancurso de ese tradicional último domingo de agosto, abrir el debate de su relevo con, quizás, un candidato de consenso.
A día de hoy, dicen las mismas fuentes, no hay un nombre con el visto bueno de todas las partes sobre la mesa, por lo que desmienten de forma tajante las informaciones que dan por hecho que Gimeno estaría de acuerdo en que el recambio para el cargo de nuevo presidente estaría en la persona de uno de los actuales consejeros delegados ejecutivos: Jesús Nuño de la Rosa.
Mientras, el presidente de El Corte Inglés está convencido de que salió reforzado del consejo de administración ordinario del pasado miércoles 10 de mayo. En dicha reunión, siempre según las mismas fuentes de su entorno, se escenificó la divergencia de opiniones entre los consejeros opuestos a Gimeno, respecto a las formas y los tiempos para sustituirle en el cargo.
Según consta en acta de dicho consejo, tras la intervención de cerca de dos horas del presidente, hubo consenso en varios puntos, entre los que destacó la necesidad de preparar la compañía para su salida a Bolsa en el momento más adecuado, en un horizonte de aproximadamente dos años.
No obstante, las fuentes explican que, por un lado, en dicho consejo ordinario siguieron enrocadas en su postura de cesar al presidente cuanto antes sus primas Marta y Cristina Álvarez -hijas de su antecesor Isidoro Álvarez- junto con el consejero delegado Víctor del Pozo, frente a la nueva postura dialogante de otros tres consejeros: Florencio Lasaga y Carlos Martínez Echavarría, y el otro consejero delegado Jesús Nuño de la Rosa.
El consejero independiente, Manuel Pizarro -que en un momento de las disputas desde octubre fue señalado como posible presidente, si bien él mismo se descartó mientras las funciones no fueran ejecutivas-, y el inversor catarí Hamad Al Thani -representado en el consejo por Shahzad Shabhaz, y que en julio podría alcanzar el 12,25% de la compañía-, también estarían de acuerdo en apostar por el diálogo con Dimas Gimeno para llegar ante la junta de accionistas con un plan de negocio pactado y esa sucesión, si así se decidiera, «tranquila».
Consejo extraordinario, sí o no
Queda pendiente de confirmación si finalmente se convocará o no el consejo extraordinario en que se quería votar la destitución de Gimeno. En principio, según los tiempos previstos en los estatutos, se tendría que haber convocado ya, si bien Gimeno asegura que no existe un documento fehaciente que le obligue a ello y de convocarlo los consejeros que lo pidieron lo reclamaría ante la justicia.
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