La factura de las pensiones supera este mes la cifra récord de 20.000 millones
El pago deja con apenas 1.500 millones el Fondo de Reserva y liquida el crédito de 13.830 millones que asumió este año la Seguridad Social con el Tesoro
La cifra de pagos que debe afrontar este mes la Seguridad Social para cumplir con los pensionistas vuelve a encender todas las alarmas. Pese al fuerte tirón de los ingresos, que crecen cerca del 8% , el sistema es incapaz de hacer frente al pago de las nóminas de los mayores con las cotizaciones que ingresa de los trabajadores en activo. Junio como noviembre son dos meses del año muy complicados para las finanzas públicas, dado que es preciso desembolsar la doble nómina que cobran los jubilados, lo que produce, de forma recurrente, fuertes tensiones de tesorería por la falta de fondos.
Cada mes son necesarios cerca de 9.800 millones para pagar la factura de las pensiones, cifra que rozará los 20.000 millones en noviembre teniendo en cuenta que también se liquidará el IRPF de las prestaciones. Los casi 8,8 millones pensionistas cobran en España 9,8 millones de pensiones, un 13% más que en 2009 (ver gráfico adjunto), lo que cada año profundiza el desfase entre ingresos y gastos, que supera los 17.000 millones, y engorda la deuda.
La factura que hay que abonar en el penúltimo mes del año ha obligado de nuevo a la Seguridad Social a echar mano de una combinación del crédito del Estado concedido a la Seguridad Social en junio y de los fondos que quedan en la «hucha» de las pensiones. Disposiciones que dan una idea de la situación por la que atraviesa el sistema de pensiones, que este ejercicio se llevará 150.000 millones, más del 40% de todo el Presupuesto del Estado y un 50% más que hace una década.
Los últimos en dar la voz de alarma han sido los actuarios, los profesionales que analizan el impacto financiero de los riesgos. La pasada semana alertaron de que el sistema es insostenible e ineficiente, adolece de fallos contributivos y es muy generoso. Su pronóstico sobre el futuro es dramático: si no se acometen reformas de inmediato las cotizaciones solo cubrirán el 25% del gasto en pensiones en 2050.
A los gastos recurrentes del sistema se han unido en los dos últimos años las mayores subidas pactadas por el PP y el PNV en 2018 , del 1,6% y del 3% para las mínimas, lo que ha impulsado al alza la cuantía media de las prestaciones. El compromiso de subir las pensiones con el IPC desequilibrará más las cuentas de la Seguridad Social.
Números rojos triplicados
Los actuarios han calculado que subir la pensiones con el IPC triplicará el déficit en 2050. El Gobierno ya ha avanzado que tiene la intención de incrementar las pensiones un 0,9% en 2020, basándose en la estimación de incremento del IPC para el conjunto de los doce meses. Un medida que acarrea un coste extra de 1.400 millones de euros y que, de mantenerse para el año posterior, consolidaría en el pasivo de la Seguridad Social. Según los actuarios, esta tendencia llevaría al sistema de pensiones a contar con un déficit anual que rondaría los 100.000 millones en 30 años.
Pedro Sánchez puede pasar a la historia como el presidente del Gobierno que liquidó el Fondo de Reserva, pensado en su momento para momentos duros del sistema y para la llegada de las generaciones del «baby boom» a partir de 2023 . Para afrontar la factura del mes ha tomado 3.500 millones de los apenas 5.000 millones que quedaban en esa «hucha», lo que dejará este colchón en apenas 1.500 millones, cifra que contrasta con los casi 67.000 millones que llegó a acumular en 2011. Además, el sistema usará los 6.330 millones que quedan del préstamo de 13.830 millones que concedió el Tesoro a la Seguridad Social, lo que dejará a cero el contador a la espera de que se produzca una nueva prórroga el año próximo.
En la paga extraordinaria de verano que cobraron los jubilados el pasado junio el Ejecutivo evitó recurrir a la «hucha». Hizo frente a los pagos con 7.500 millones procedentes del citado crédito de 13.830 millones. Además, también utilizó los ingresos corrientes por cotizaciones sociales debido al crecimiento de la afiliación en la Seguridad Social.
En 2011, en el último año del Ejecutivo de Rodríguez Zapatero, el Fondo de Reserva de la Seguridad Social llegó a su cota más alta, con 66.815 millones . A partir de ahí, la hucha de las pensiones empezó a bajar como consecuencia de la destrucción de más de 3,5 millones de empleos, y de la caída de los ingresos por cotizaciones sociales que llevó aparejada la crisis.
Deuda disparada
Los fondos han ido menguando en los últimos años al mismo ritmo en el que crecía el endeudamiento. Como ya informó ABC, el recurso a los préstamos del Estado para financiar el pago de pensiones en los últimos dos años ha disparado un 82,3% la deuda de la Seguridad Social en tan solo dos años.
El organismo que sostiene las pensiones y que además se hace cargo de otras prestaciones como el desempleo elevó el pasado julio hasta 49.944 millones de euros sus obligaciones. A cierre de 2017, un año antes de que estallara la crisis, la cifra ascendía a 27.393 millones, lo que supone que en menos de dos años el instituto de previsión ha engordado sus deudas con 22.551 millones de euros más.