Los eurodiputados piden transparencia en la ejecución de los fondos europeos
Los representantes españoles en Bruselas advierten del riesgo de asimetría entre grandes empresas y pymes en el acceso a las ayudas
Los eurodiputados españoles suman fuerzas para evitar que los fondos europeos terminen por convertirse en un 'quiero y no puedo' ante el riesgo de una mala ejecución del plan por el que España percibirá 140.000 millones de euros . Pese a su distinto color político, José Manuel García Margallo (PP), Ernest Urtasun (Los Verdes), Luis Garicano (Ciudadanos) y el socialista Jonás Fernández, llevan meses trabajando mano a mano para que el histórico plan europeo como respuesta a la crisis del coronavirus salga adelante sin obstáculos. «En Bruselas no hay disciplina de partido y eso te da más flexibilidad para negociar», explican.
En un reciente seminario organizado por el Parlamento Europeo en Madrid, los cuatro coincidieron en la buena acogida que han tenido los primeros detalles del Plan de Recuperación y Resilencia español que el Gobierno aprobará este mismo martes y que espera remitir a Bruselas antes del 30 de abril. Pero advierten de que la transparencia en el proceso de ejecución debe ser más clara incluso antes de que el dinero llegue para los proyectos. «El Gobierno ha hecho bien sus deberes, pero las reglas de acceso a los fondos tienen que ser más claras», explicó durante el debate Urtasun. Una idea en la que el resto de participantes coincidieron. «Cómo gastar el dinero y cómo gastarlo bien es ahora el mayor reto al que nos enfrentamos», insistió Garicano, portavoz de Renew en la Eurocámara.
El eurodiputado advierte de que España corre el riesgo de cometer errores del pasado en la asignación de recursos «que puedan darse a dedo», considerando fundamental la creación de un organismo independiente para vigilar la gestión de los fondos. Todos quieren mayor transparencia en el proceso. Denuncian que incluso «hay ayuntamientos y pequeñas empresas que ni siquiera saben el número de teléfono al que llamar para presentar sus propuestas», mientras grandes compañías ya plantean el acceso al dinero con grandes proyectos detallados.
«En los últimos meses se ha visto que las grandes empresas tienen mayor capacidad de acceso a la información frente a las pymes y esa asimetría es una desventaja para estas últimas », insisten. Un factor que preocupa por la posibilidad de que las compañías de mayor tamaño acaben usando los recursos «para limpiar sus resultados o reforzar sus posiciones monopolísticas».
«Gestionar los fondos es uno de los mayores retos que tenemos y por eso hemos creado un equipo específico para ello», defendió Esperanza Samblás, directora general de fondos europeos del Ministerio de Hacienda, durante su participación el debate. «Cuando el plan del Gobierno se presente a la Comisión, de la que ya hemos recibido valoraciones informales muy positivas, el reto será que seamos capaces de ponerlo en marcha, algo que necesita la colaboración de todos. Solo así seremos un ejemplo para toda Europa», explicó.
Durante el encuentro, todos hicieron hincapié en la necesidad de cumplir con los principios de condicionalidad que van asociados al reparto de los fondos, tanto en las reformas que deben aplicarse siguiendo las recomendaciones de Bruselas, como en el propio uso de los recursos.
Para García-Margallo, llegar a buen puerto en la reforma laboral será clave en este sentido. «Hay que fomentar la contratación indefinida , luchar contra el desempleo, el abandono escolar y apostar por la investigación y la innovación. Es ahí donde estará condicionada la adjudicación de los tramos sucesivos de los fondos», insistió.