La desaceleración dispara el ahorro de los hogares a máximos desde 2013
Las familias contraen su consumo y guardan ya el 8,7% de su renta disponible

La desaceleración ha llegado al bolsillo de los españoles, a través de un menor consumo y un aumento del ahorro ante futuras curvas en la actividad. Los hogares elevaron su tasa de ahorro al 8,7% de su renta disponible durante el segundo trimestre de 2019, según datos del INE, dos puntos más que a finales de marzo. Este porcentaje supone así e l mayor dato cosechado desde el segundo trimestre de 2013 , hace seis años, cuando la economía española estaba en recesión. De hecho, el máximo histórico de la tasa de ahorro fue del 12,1% en pleno inicio de la crisis, en el segundo trimestre de 2009.
La tendencia indica que los españoles ahorran en época de vacas flacas y gastan en ciclos de bonanza . El comportamiento de los hogares simboliza el enfriamiento de la confianza de las familias en un momento de cambio de ciclo en la actividad. Ello repercutió en el consumo. De esta forma, pese a que la renta disponible bruta de los hogares aumentó un 2,9% en el segundo trimestre, el consumo de las familias creció un 0,02%, su dato más bajo, también, desde el mismo periodo de 2013 .
El consumo lleva 23 trimestres seguidos creciendo, desde que España arrancó la recuperación en 2013 mientras que la tasa de ahorro estaba en niveles mínimos, por lo que un aumento de esta última es positivo. En parte, también revela que la demanda embalsada desde la crisis de bienes duraderos, que llevó a un fuerte aumento del consumo en la recuperación, ya ha llegado a su fin.
Este estancamiento repentino del consumo -que en el anterior periodo repuntó un 0,2%- repercutió en el frenazo del Producto Interior Bruto (PIB), que solo creció un 0,4% en estos tres meses, su dato más bajo desde 2014.
Así, la capacidad de financiación de las familias e instituciones sin fines de lucro alcanzó en el segundo trimestre los 33.004 millones de euros, el máximo de la serie del INE que arranca desde 1999. Ello supone 9.001 millones más de lo alcanzado en el mismo trimestre del año pasado. Ello contrasta con los 14.800 millones que gastaron los hogares sobre lo que ingresaron en 2018 o los 4.759 de 2017. Una situación ante la que el Banco de España alertó hace unos meses de que había una tendencia de que los hogares de rentas bajas estaban consumiendo por encima de sus posibilidades.
Ahora el renovado ahorro se suma al desapalancamiento de las familias españolas, que desde los máximos de crisis han bajado en 207.836 millones de euros hasta los 705.154 millones del pasado mes de agosto, que asciende a un 59% del PIB. En noviembre de 2008, justo cuando estalló la burbuja inmobiliaria, los hogares tenían una deuda de 912.990 millones de euros, el máximo histórico. De ellos, dos tercios eran en forma de hipoteca: 678.951 millones. Desde entonces, las familias españolas han amortizado 161.693 millones en préstamos de vivienda.
Lejos de la media europea
Pese a este aumento de la tasa de ahorro, los hogares españoles siguen lejos de la media de la Eurozona, que en el segundo trimestre alcanzó un 13,3%. Las familias alemanas destinaron en 2018 un 18% de su renta disponible al ahorro, las que más, seguidas de las holandesas (15,25%), las francesas (14,7%) y las austríacas (12,7%). Entre los países con menor ahorro de sus hogares están Portugal (4,5%), mientras que Italia exhibe un 9,9%, según los datos de Eurostat.