La cesta de la compra se encarece en España un 30% más que en el resto de los países del euro
La tensiones en los mercados de la energía por el conflicto en Ucrania ensanchan el diferencial de precios con la Europa del euro, castiga a los consumidores españoles y erosiona la competitividad de la economía
Economía de guerra: estos son los alimentos que van a subir de precio más rápido
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El Gobierno no deja de repetir que esta vez España no será uno de los países más afectados por la crisis de Ucrania y por el descontrol de los precios en el mercado de la energía que esta ha traído consigo. Pero el ... INE se empeña en llevarle la contraria. El Índice de Precios de Consumo (IPC) del mes de febrero, el primero directamente afectado por la onda expansiva de la invasión rusa de Ucrania, mostró un encarecimiento de los precios del 0,8% en relación al mes anterior y un repunte anual del 7,6% , la tasa más alta registrada desde 1986 .
La información proporcionada ayer por el INE muestra otro dato inquietante. Mientras el coste estimado de la cesta de la compra se incrementó en España un 7,6% en los últimos doce meses, en el conjunto de la Europa del euro no lo hizo más que un 5,8%, casi dos puntos menos, lo que implica que los consumidores españoles han sufrido un encarecimiento de los precios un 30% superior al de sus vecinos en el curso de los últimos doce meses.
No sólo es una mala noticia para los consumidores. Los economistas interpretan ese diferencial de inflación como una señal de pérdida de competitividad de una economía en relación a sus pares y España acumula cerca de un año ya con una dinámica de precios mucho más acelerada que nuestros vecinos, principalmente por la mayor sensibilidad del sistema doméstico de formación de precios a cualquier turbulencia en los mercados energéticos. Se da la circunstancia, además, de que las tensiones generadas por la invasión rusa de Ucrania han ensanchado esa brecha entre la evolución de los precios en España y en el resto del euro en lugar de acortarla.
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Evolución del IPC
7,6
6,5
En porcentaje
6,1
5,5
5,4
Fuente: INE
/ ABC
4,0
3,3
2,9
2,7
2,7
2,2
1,3
0,5
0,0
-0,5
D
2020
E
2021
F
M
A
M
J
J
A
S
O
N
D
E
2022
F
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Evolución del IPC
En porcentaje
2020 D
-0,5
2021 E
0,5
0,0
F
1,3
M
2,2
A
2,7
M
2,7
J
2,9
J
3,3
A
4,0
S
5,4
O
5,5
N
6,5
D
6,1
2022 E
7,6
F
Fuente: INE
/ ABC
El fenómeno se produce en paralelo a una cada vez mayor traslación de las tensiones en los precios energéticos al resto de rincones del tejido productivo. La inflación subyacente, que refleja la evolución de los precios en el núcleo más estable de la cesta de la compra y que hace menos de un año estaba en nivel 0, llegó en febrero a la barrera del 3% – el más alto desde 2008 – y certificó que los temidos efectos de segunda ronda de la inflación ya empiezan a ser realidad .
Este escenario se traduce en una doble factura para el bolsillo del consumidor, a quien no le queda más remedio que asumir el elevado coste de la energía y, al mismo tiempo, el encarecimiento que se traslada a otros bienes y servicios, como los alimentos.
España urge a limitar los precios de la energía
El Gobierno está convencido de que la única manera eficaz de hacer frente a esta espiral inflacionista es limitar por ley el precio de la energía . La vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño , admitió el pasado jueves que el Gobierno va a esperar a la decisión al respecto que tome Europa y que si esta no afronta con decisión la contención de los precios energéticos será el propio Gobierno el que legisle.
Economía asume que la configuración marginalista del mercado mayorista de la energía perjudica a España más que a otros países y está dispuesta a hacer lo que sea para amortiguar el impacto del actual contexto de tensión de precios «sobre las familias y también sobre las empresas».
De telón de fondo el riesgo de que el IPC supere la barrera psicológica del 10% , como ya apuntan algunos economistas. Calviño entiende que con los precios de la energía bajo control la inflación descendería rápidamente, lo que no sólo supondría un alivio para las economías domésticas sino también para el Gobierno preocupado por el coste que esta situación pueda acarrear sobre el sistema de pensiones y por la deriva salarial que se puede generar en este contexto.
Presión por la electricidad y los carburantes
En comparación con febrero de 2021, los precios que más han subido son los de la electricidad (80,5%) , los combustibles líquidos (52,3%), el butano y el propano (33,4%), el diésel (28,4%) o la gasolina (25,1%). También subieron algunos alimentos que componen la cesta de la compra, como los aceites comestibles (32,3%).
Entre los grupos con mayor influencia positiva en el aumento de la tasa anual, destaca la vivienda, dónde la variación anual fue del 25,4%, más de siete puntos por encima de la registrada en enero. Esto se debe una vez más al comportamiento de los precios de la electricidad, que se encarecieron un 80,5% en relación al mismo mes de 2021. Si se descontaran las rebajas fiscales aprobadas por el Gobierno para contener la subida de la factura de la luz, cuyo coste el Gobierno estima ya en una horquilla de entre 10.000 y 12.000 millones , el IPC habría alcanzado el 8,5%, según los cálculos del INE.
Por su parte, el transporte situó su tasa en el 12,8%, un punto y medio superior a la del mes pasado. Los carburantes se han disparado por el incremento del coste del barril de petróleo: el diésel subió un 28,4% y la gasolina, un 25,1%. En febrero, el precio del barril de petróleo marcó un promedio de 99,8 dólares, lo que supuso un incremento del 13,4% con respecto a enero y del 59% en términos interanuales. En lo que llevamos de marzo, el precio medio del barril se ha situado en 126 dólares . lo que augura que el IPC tal vez no haya encontrado todavía su techo en el mes de febrero.
También subieron los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas, que registraron una variación al alza de ocho décimas, hasta el 5,6%. Por productos, dentro de la cesta de la compra se encarecieron productos como los aceites comestibles (32,3%), el aceite de oliva (30,6%), las pastas alimenticias (19,9%), las harinas y otros cereales (12%), la carne de ovino (10%), las frutas en conserva (10%), el arroz (9,4%), la leche desnatada (9,4%) y la leche entera (9,3%).
La espiral inflacionista del gas y de la electricidad repercute en la alimentación por el transporte y la energía utilizada en las plantas de transformación. Además, tal y como publicó ABC, la cesta de la compra se disparará en las próximas semanas no sólo por el encarecimiento de la energía , sino también por la escasez de materias primas ya que Ucrania es el primer proveedor de nuestro país de maíz y de girasol y el cuarto en trigo.
El IPC refleja la reactivación del turismo y la restauración frente a 2021. Los precios de hoteles, cafés y restaurantes repuntaron siete décimas, hasta el 3,6%, al calor de la mayor demanda. También subieron los hoteles, hostales, pensiones y servicios de alojamiento en un 21,1% por la recuperación en la llegada de turistas en comparación con el año pasado.
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