Los bancos asumen las fusiones como su último salvavidas
Unicaja y Liberbank anunciaron ayer que están en contactos «preliminares»

Lo de Caixabank y Bankia era el primer plato, pero faltan todavía el segundo, el postre, el café y la sobremesa. La crisis del Covid-19 ha acelerado las fusiones estos meses como fórmula de supervivencia porque el negocio no tira y los números no dan. La banca es consciente de que su rentabilidad no es sostenible , aunque vendan que la solvencia y liquidez están a tono. Y ni hablar de momento de la morosidad que vendrá en 2021; ahí el problema será mayúsculo, como indican las fuentes consultadas. Entonces, de esta crisis solo se sale con ayuda de una pareja, o quién sabe si en trío.
Unicaja y Liberbank confirmaron ayer ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) lo que era un secreto a voces: están en contactos «preliminares» para estudiar su unión. Aunque más bien sería una absorción, de la primera sobre la segunda, al estilo de Caixabank sobre Bankia . No es ninguna sorpresa que estas dos entidades se han gustado desde el principio y su relación está llamada a prosperar. Ya lo intentaron no hace mucho, pero fracasaron en los primeros meses de 2019. Esta es una segunda oportunidad que se dan después de que en aquel momento chocaran por la ecuación de canje: Unicaja quería retener el 60% del capital social y Liberbank superar el 42%. Las cifras no cuadraron.
Ahora la situación es distinta. La rentabilidad (ROE) de la firma de origen andaluz está en el 3,1% -y bajando-, mientras que la de la asturiana no llega al 2%. El Banco Central Europeo (BCE) lleva meses empujando a la consolidación, pero esta no es una fusión solo de necesidad sino de oportunidad. Fuentes financieras dicen que es una buena opción para dar el salto de bancos regionales a uno nacional. Sus áreas de actuación geográfica no se solapan tanto, con lo que el crecimiento del negocio está servido. En su momento calcularon que el ahorro en costes por las sinergias ascendería hasta los 150 millones anuales. De ejecutarse, Unicaja y Liberbank estarían en disposición de alumbrar el quinto banco de España, dejando en el retrovisor a Bankinter y Abanca, con un volumen de activos de casi 109.000 millones, además de contar con más de 1.600 oficinas y casi 10.000 empleados.
Así las cosas, según ha podido saber ABC, las conversaciones se están produciendo al más alto nivel . Es decir, entre el presidente de la andaluza, Manuel Azuaga , y el consejero delegado de la asturiana, Manuel Menéndez . Aun así, todavía no han entrado los asesores, esto es bancos de inversión, consultoras y despachos de abogados. Lo que sí existen son contratos digamos de tarifa plana de Liberbank con Deutsche Bank y el bufete Ramón y Cajal para llevarles cualquier operación societaria. En cuanto haya más avances, serían estas dos firmas las que pilotarían el proceso desde esta parte.
El baile está en marcha
Pese a todo, la operación que más espera el mercado no es esta entre bancos medianos, sino de otros dos a un nivel más alto. Concretamente, la de BBVA y Banco Sabadell .
Los contactos iniciales ya han existido, como publicó ABC hace semanas, pero aún no hay oficialidad. Están en conversaciones también preliminares al más alto nivel ejecutivo. Y prueba de que los inversores apuestan por el Sabadell como próximo protagonista de cualquier operación está en el parqué: sus acciones subieron ayer más de un 3,8% tras el anuncio de los otros dos bancos medianos, el que más de entre las entidades del Ibex 35. Tampoco se descarta su entrada en una futura operación en la nueva Caixabank, cuando haya absorbido Bankia, aunque eso sería más a futuro pensando ya directamente en 2021.
Fuentes financieras apuntan a que la firma catalana necesita una salida más pronto que tarde porque dudan de que pueda soportar que se desboque la morosidad en 2021. Se da por descontado que se superará el 9-10% de tasa de mora, pudiendo rebasar incluso el máximo de la última crisis de deuda del 13,6%. Además, el Sabadell tiene una alta exposición a pymes y autónomos; es el banco de las empresas, que se dice , lo cual amenaza con jugarle en contra en esta crisis.
Más allá de ello, otras entidades como Abanca e Ibercaja también están en las quinielas para una posible operación. La entidad gallega, como desveló este periódico, estuvo inmersa en un tanteo con el Sabadell pero la operación no llegó a fructificar.
Lo cierto es que Abanca tiene dinero para salir al mercado a comprar y está dispuesto a utilizarlo. A la vista está que es la entidad que más se ha movido en los últimos tiempos con varias operaciones corporativas. Precisamente hace poco cerró la compra de Bankoa para convertirse en el quinto banco de España, un puesto que peligra ahora por Unicaja-Liberbank , y ganar cada vez más presencia en todo lo que tiene que ver con el norte de España. De esta manera, el Covid ha logrado en menos de un año lo que el BCE lleva años buscando. La consolidación ya está aquí.
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