Azuaga se aferra a dirigir Unicaja en contra del pacto de fusión
El presidente choca con la fundación del banco, que busca aumentar el dividendo
Unicaja Banco es ya una sola entidad tras absorber a Liberbank, aunque las luchas internas evidencian que todavía existen dos realidades, y con el máximo accionista de por medio. La guerra está servida y cada cual maniobra para decantar la balanza a su favor. Por una parte, el presidente Manuel Azuaga ; por otra, la Fundación Unicaja y su presidente Braulio Medel . En juego, el control del quinto banco más grande de España.
Al momento de pactar la fusión, el esquema de dirección que se decidió fue que Azuaga, procedente de Unicaja, se quedara la presidencia, y que Manuel Menéndez , de Liberbank, fuera el consejero delegado. Todo con un matiz importante: el primero se jubilaría en 2023 y su cargo pasaría a ser no ejecutivo. Aquí surge el problema, ya que, según fuentes del consejo de administración, Azuaga pretende ahora mantenerse en el cargo y con poderes ejecutivos para no entregar la dirección a la parte de la absorbida .
Sin embargo, el actual presidente pudo haber evitado esta situación en el momento de las negociaciones. Fuentes del consejo explican que las dos entidades llegaron a un acuerdo verbal por el cual Unicaja podía elegir entre quedarse el puesto de CEO o la presidencia... y eligió la presidencia, con lo que luego eso conllevó, ya que el Banco Central Europeo (BCE) tolera cada vez menos las presidencias ejecutivas y exigió que con el tiempo se le despojara de esos poderes, como está previsto que ocurra.
Aquí es donde entre la fundación, con el 30,23% del accionariado. Si bien Azuaga quiere revertir lo pactado en la absorción, esta considera que hay que cumplir con lo acordado y que el primer cargo ejecutivo decaiga del lado de Menéndez, que también deberá ser ratificado en 2023 para seguir en su puesto.
Medel, presidente de la fundación, buscará por todos los medios hacer cumplir con lo acordado e instar a la entidad a desarrollar un plan de negocio rentable que maximice el dividendo . Porque en realidad, la fundación vive del dividendo, como también ocurre con La Caixa en Caixabank.
Azuaga, por su parte, sigue moviendo sus hilos a través del consejo de administración para frenar las iniciativas de Medel. Fuentes de este órgano señalan que está maniobrando, incluso a nivel político, para lograr que salga el presidente de la fundación , colocar ahí a una persona más política y poder controlar que no se inmiscuya en la gestión del banco. Además, la pelea ya ha llegado también a los juzgados. Una agrupación de sindicatos ha denunciado a Medel por varios delitos supuestamente cometidos hace años. De nuevo, la búsqueda de cuestionar la idoneidad del máximo dirigente de la fundación para presidirla.
Patronos de la fundación
En este sentido, cabe recordar que algunos patronos de la fundación han impugnado el acuerdo alcanzado para mantener los mismos representantes que tienen en el consejo de Unicaja. Incluso han llegado a pedir amparo al Ministerio de Asuntos Económicos, mediante un escrito ante el Protectorado de las Fundaciones Bancarias, debido a lo que consideran «irregularidades» en la gestión y toma de acuerdos de la institución. Se trata de los mismos cuatro miembros que votaron en contra de mantener los mismos representantes en el consejo. El Gobierno ya ha solicitado información a la Fundación Unicaja .
Así las cosas, la situación tiene difícil solución sin que sea traumática. Una lucha de poder entre el máximo accionista y el presidente y su entorno, que tiene soliviantados a determinados círculos de la sociedad malagueña. Pues en la ciudad que viene siendo sede de Unicaja desde su fundación como caja de ahorros en 1991 se contempla con reticencia que el crecimiento del banco termine conllevando la pérdida de peso de los directivos locales en su sala de mando , informa Fernando del Valle. Ello explica que desde hace semanas todos los partidos políticos, espoleados por la antigua cadena de mando del banco, hayan manifestado su defensa de una Unicaja 'malagueña' y 'andaluza' e incluso haya surgido una plataforma ciudadana llamada Salvemos Unicaja . Un colectivo que lidera un exconcejal de Izquierda Unida del que ya se ha excluido el PP y que ha pinchado en sus llamadas a movilizar a la ciudadanía contra Medel. La junta de accionistas que se celebrará en los próximos meses será un momento clave para sentar posturas.