Austria no apoya a Calviño: opta por el candidato irlandés para presidir el Eurogrupo
La ministra española cuenta con el apoyo de dos pesos pesados de la zona euro como Francia y Alemania

Austria no apoyará a Nadia Calviño cono candidata a presidir el Eurogrupo, sino al ministro de Finanzas de Irlanda, Paschal Donohoe . Así lo ha anunciado el responsable de Finanzas de Viena, Gernot Blümel, cuyo argumento es la necesidad de reforzar a representación de los países pequeños de cara al reparto y gestión del Fondo de Reconstrucción europeo y la conveniencia de optar por un candidato de perfil más «disciplinado».
La elección de presidente del Eurogrupo corre en paralelo a tensas negociaciones presupuestarias y de reparto de las ayudas para contrarrestar la crisis causada por la pandemia . Fluirán hasta 750.000 millones de euros para el nuevo programa de estímulo económico de la UE y Austria teme que países grandes como Alemania y Francia o España e Italia marquen la pauta, mientras que los países más pequeños difícilmente sean escuchados. Austria llama a evitar esta situación con una decisión personal.
El gobierno austriaco teme claramente que el juego de póker históricamente único por el volumen del paquete socave los intereses de la República Alpina y otros países pequeños y medianos de la Unión. «El Eurogrupo enfrentará grandes desafíos en los próximos meses y años, y es aún más importante que no solo los grandes países formen el discurso aquí», ha dicho Blümel a medios alemanes, «esperamos que se escuchen los intereses de los países pequeños porque estas voces son igual de importantes«.
«Especialmente cuando se trata del uso del dinero de los impuestos, es necesario comprender las posiciones de las economías pequeñas y medianas, y la presidencia debe asumir una función neutral de construcción de puentes. Veo ambos aspectos bien anclados en Paschal Donohoe», ha señalado e miembro del Partido Popular de Austria (VÖP), señalando que ese cargo jugará un papel importante en el esquema general del plan de recuperación y en la implementación del programa, por las posiciones que adopte la futura presidencia en cuestiones de estabilidad y reglas fiscales.
«Irlanda ha tomado un curso de reforma disciplinado en los últimos años y conoce los desafíos y desafíos de los mecanismos de ayuda europeos, lo que ciertamente no sería una desventaja en la situación actual», dijo Blümel, subrayando especialmente que las condiciones que los estados deben cumplir para recibir ayuda de Bruselas siguen siendo muy controvertidas. Al igual que Holanda, el gobierno de Austria insiste en estrictos requisitos de reforma e inversión, los grandes países receptores rechazan esas estrictas condiciones.
La ministra española cuenta con el apoyo de dos pesos pesados de la zona euro como Francia y Alemania , cuya canciller federal, Angela Merkel, preside el Consejo Europeo este semestre. En total necesita diez votos y acude a la videoconferencia de mañana con aproximadamente la mitad de ellos apalabrados . Se enfrenta a dos veteranos como son el ministro de Finanzas de Luxemburgo, Pierre Gramegna, y el irlandés, Paschal Donohoe, que pertenece al Partido Popular Europeo. La suma de los votos de su familia y otras formaciones de derecha podrían llegar a 9, aunque no todos los ministros del PPE votarán por él. Grecia, pro ejemplo, ya se ha descolgado. Calviño tendría que sumar no solo votos socialistas, sino también del bloque del Sur, además de otros que pueda sumar por su curriculum y por el hecho de ser mujer.
Tan solo un par de funcionarios del Consejo sabrán el sentido de los votos. Los candidatos no solo desconocerán cuáles son sus apoyos, sino incluso el número. Tan solo sabrán si reciben la mayoría simple que necesitan para ser elegidos. Si tras la primera votación nadie llega a los diez votos, se informará del orden en el que han quedado según los apoyos. En ese momento se espera que el tercero se retire de la carrera, despejando el camino a los dos finalistas y, por lo tanto, la votación final. El ganador es confirmado por «mutuo acuerdo», respetando así el espíritu de consenso por el que se toman las decisiones en el Eurogrupo.
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