Los alemanes temen que la economía de su país vaya a peor
Los refugiados y los atentados generalizan un sentimiento de inseguridad

La economía ni siquiera es una preocupación para el Gobierno alemán y el Bundesbank espera un crecimiento del PIB de un 1,7% este año, un 1,8% en 2016 y un 1,7% en 2017. La crisis del euro ha remitido, el nivel de empleo y de recaudación está en topes históricos y la confianza de los inversores ha registrado en diciembre un incremento de 5,7 puntos . Y sin embargo, los alemanes se desearán feliz 2016 con «la boca pequeña» porque tienen miedo.
El 55% de los encuestados por el instituto demoscópido GfK afirma que siente «miedo» por la economía alemana , un porcentaje que el año pasado era del 31% y en 2013 del 28%. El temor se agudiza entre la población mayor de 64 años, pero también un 42% de los jóvenes de entre 14 y 34 años asegura «mirar con miedo al futuro», cuando en 2013 esa franja de edad registraba solamente un 19%.
¿Qué es lo que preocupa tanto a los agentes económicos de la locomotora europea? ¿A qué se debe que más del 80% de los alemanes espere un inminente «empeoramiento» de la situación económica? El director de la Fundación para Preguntas del Futuro, Ulrich Reinhardt , considera que asistimos al regreso del «miedo alemán», que define como una predisposición colectiva a pensar que el futuro será peor que el presente, y apunta como desencadenantes de esa sensación «la avalancha de refugiados y los recientes a tentados terroristas , que han generalizado un sentimiento de inseguridad».
Cargas adicionales
Uno de cada cuatro alemanes , el 79% de los encuestados, cuentan con que el país tendrá que afrontar graves problemas económicos próximamente y la franja de edad más asustada ante la posibilidad de una quiebra económica es la intermedia, entre 35 y 54 años. «Especialmente l os trabajadores adultos esperan cargas adicionales y no ser capaces de mantener su nivel de vida en el futuro, por lo que debemos contar con una reducción del consumo y un mayor esfuerzo por ahorrar», profetiza Reinhardt. Algunos analistas consideran que ese miedo puede ya percibirse leyendo entre líneas los datos de confianza de los inversores ZEW . «Aunque vemos alzas, hay que tener en cuenta que el índice general sigue siendo significativamente menor que los niveles de alrededor de 50 puntos vistos en la primera mitad del año».
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