PwC advierte de que la gran banca europea aún se enfrenta a riesgos
Un informe de la consultora destaca que seis años después de comenzar la crisis, los bancos han logrado reducir su tamaño y mejorar sus ratios de capital y liquidez
La gran banca europea ha conseguido seis años después de comenzar la crisis, reducir su tamaño, mejorar sus ratios de capital y liquidez, además reducir su exposición al riesgo , aunque aún debe terminar de ajustarse a las nuevas exigencias regulatorias. Esta es una de las principales conclusiones de un informe elaborado por PwC, que analiza la evolución del tamaño de la banca europea -y la compara con la gran banca global- a partir del análisis de las cuentas de 33 bancos de la Unión Europea (17), Australia, Canadá, Japón y Estados Unidos, entre 2009 y 2013.
Según el citado estudio, la gran banca europea cuenta ahora con balances más saneados, ajustados y líquidos, y ello después de haber reducido sus activos un 3%, pasando de 1,097 a 1,064 billones de euros (entre 20012 y 2013 esta rebaja fue del 11%).
Además, la banca europea cuenta con unos ratios de capital al mismo nivel que los principales bancos mundiales y ha reducido sustancialmente su exposición al riesgo (los activos en riesgo sobre el total han caído del 36,9% al 34,6%).
En concreto, la gran banca europea ha centrado sus esfuerzos en minimizar su dependencia de aquellos activos más volátiles y han apostado por volver a lo fundamental, es decir, aumentar el número de clientes y de depósitos, que han crecido un 14,5 %, entre 2009 y 2013.
Pero, además, las entidades financieras europeas son ahora más líquidas y están, por tanto, en una posición mucho mejor de afrontar una eventual crisis financiera.
Desde 2009, han aumentado su efectivo, o equivalente de efectivo, un 78%, en tanto que sus activos líquidos han pasado del 9,2 % al 11,6% y han reducido su deuda a corto plazo un 38 %.
Sin embargo, todos estos avances no quieren decir que la gran banca europea haya recorrido ya todo el camino de salida de la crisis y que lo que queda vaya a ser fácil, advierte el informe, que asegura que los reguladores todavía están pendientes de cerrar muchos desarrollos normativos relevantes a la hora de gestionar los balances de las entidades y sus modelos de negocio.
Para Alejandro Esnal, socio de PwC responsable de Auditoría en el sector Bancario, "la banca europea ha hecho un gran esfuerzo en muy poco tiempo, cuenta con unos balances más sólidos y saneados que antes de la crisis y está en una mejor posición para aprovechar las oportunidades de negocio que se van a recuperar a medida que la economía en la UE se vaya recuperando".
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