Bankia garantiza que el escándalo de las tarjetas «B» no está lastrando su actividad

La actual dirección de BFA-Bankia ha realizado este viernes una valoración a fondo del escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid que ella mismo destapó . Lo ha hecho durante la presentación de los resultados del banco durante los nueve primeros meses del año, en los que ganó 1.151 millones, un 77,7% más, gracias al buen pulso comercial . Esas cuentas no reflejan el posible daño reputacional del mencionado caso, desvelado en octubre. « El tema de las tarjetas no nos va a cambiar las cosas ni a mejor ni a peor. Todo este ruido no está afectando a nuestra actividad», ha garantizado el consejero delegado del grupo, José Sevilla, en rueda de prensa.

La evolución del negocio de Bankia durante este mes, según el banquero, «está siendo totalmente normal y en línea con los anteriores». Bankia tampoco cree que esta situación puede entorpecer la reprivatización del banco y que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), esto es, el Estado, pueda volver a vender un paquete de sus acciones del grupo cuando las condiciones del mercado sean las propicias. «Si no tiene impacto en la actividad comercial, en el mundo de los inversores todavía menos», ha dicho Sevilla.

Ahora bien, el sector financiero español coincide en señalar que este caso ha lastrado aún más la reputación de la banca y sus directivos, muy dañada desde el estallido de la crisis. «Que duda cabe que tiene impacto sobre la imagen del sector en su conjunto», ha admitido el «número dos» de la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri, que ha enmarcado ese escándalo en las malas prácticas llevadas a cabo en el pasado en algunas cajas de ahorros, entre ellas Caja Madrid. «No han sido prácticas generalizadas y se han corregido, no deberían volver a producirse», ha zanjado.

Sevilla ha recordado al respecto que Goirigolzarri y su equipo levantaron todas las alfombras de Bankia a su llegada a la entidad, tras la dimisión de Rodrigo Rato y el rescate de la entidad financiera. Ya entonces, y antes de determinar las ayudas a pedir a la Comisión Europea para recapitalizar y sanear la entidad, la actual dirección hizo un provisiones multimillonaria de operaciones ruinosas, lo que llevaron a Bankia a registrar las pérdidas más elevadas en la historia financiera de España. «No queda ningún agujero por venir, ya identificamos todos los posibles quebrantos en su momento», ha explicado, añadiendo que la entidad ha dado cuenta a las autoridades judiciales y supevisoras —la Fiscalía y el FROB— de una veintena de operaciones crediticias y de inversión presumiblemente irregulares para que las investiguen y depure las posibles responsabilidades que se deriven de ellas.