A Didac Costa aún le faltan 11.000 euros para poder realizar las transmisiones por satélite

Solo faltan cuatro días para el inicio de la Vendée Globe, y Dídac Costa tiene prácticamente a punto su "One Planet One Ocean" para emprender la vuelta al mundo en solitario sin escalas ni asistencia. Tras dos semanas de intenso trabajo, la electrónica de su barco está repuesta y ayer por la tarde el navegante barcelonés realizó una última salida que le permitió validarla en el agua. En esta misma navegación el equipo estuvo preparando ya las maniobras más probables para el día de la salida, a la vista de las previsiones meteorológicas que se empiezan a barajar.

Tranquilizado respecto de la reparación de los daños provocados hace un mes por un rayo, y tras superar las últimas revisiones de seguridad realizadas por la organización, Costa solo está pendiente de cargar las provisiones para el centenar de días que calcula que necesitará para completar su segunda vuelta al mundo. En la primera, realizada a dos en compañía de Aleix Gelabert y con salida y llegada a Barcelona, el "One Planet One Ocean" invirtió 98 días.

El bombero barcelonés está “muy agradecido” por la respuesta a su petición de ayuda en forma de crowdfunding. En poco más de dos semanas, ha cubierto los fondos para reparar la electrónica dañada por el rayo y ha podido comprar el paquete de información meteorológica durante la regata.

Algunas pequeñas empresas han respondido también al llamamiento y se han convertido en copatrocinadoras de un proyecto cada vez más colectivo, en una experiencia inédita en nuestro país.

Pese a haberse recaudado 25.000 euros, mediante donaciones de entre 10 y 2.000 euros, el crowdfunding no ha concluido, pues a Costa aún le faltan 11.000 euros para poder realizar las transmisiones por satélite (videos, fotos, audios y textos) que le permitan compartir su aventura con miles de seguidores.

Para Costa, “tan importante como el dinero recaudado hasta el momento son los mensajes de apoyo que he recibido” y que reafirman al bombero barcelonés en su deseo de no defraudar las esperanzas puestas en él para convertirse en el segundo español que completa la Vendée Globe.