José Luis Suevos - Ganando barlovento
Una Copa muy difícil de digerir
La Copa América se asienta en dos principios: tecnología y fuerza humana. Se acabó la táctica y la inteligencia
La Copa América esta que se está disputando en Bahamas (Reino Unido, que no EE.UU.) me está resultando un poco empalagosa porque, al fin y al cabo, todas las regatas que se disputan con el mismo viento, son iguales. Velocidad, velocidad y velocidad. Más aburrido que la actual Fórmula 1 de los coches. Podría calificarlo como una estafa deportiva, porque de deporte... nada de nada, y claro, los patrocinadores a poner los cuartos y a chupar muy poquita cámara.
«Ojalá acabe pronto esta manera de competir, porque sino llegará un día que los barcos irán solos, sin tripulantes ni patrón y serán gobernados desde los pantalanes con un radiocontrol»
José Luis Suevos
Está muy lejos de lo que los puristas de la vela conocemos como Copa América: un club, un armador, un barco y un país. Todo aderezado con materiales y efectivos humanos originarios de los países que entran en contienda. Se me hace duro ver a Joan Vila haciendo de meteorólogo del «Oracle», con lo que vale este chico. Pero es que España no está en la Copa América por méritos propios. Hemos quemado a los patrocinadores y la vez que estuvimos más cerca de la gloria, veáse 2007 con el Desafío Español, va Iberdrola y se marcha porque no sabemos retenerla. De los Desafíos anteriores, no hablo porque hablar de ello, en este país, es pecado.
En fin, que la Copa América se asienta en dos principios fundamentales: la alta tecnología y la fuerza humana. Mis amigos los «kiwis» han dado el campanazo con reemplazar a regatistas por ciclistas. Tanto es así, que ni el gran Ray Davies va en el barco. ¿Para qué, si ya no hay táctica alguna? Todo depende de la energía que consigan las piernas de los fornidos grinders-ciclistas y de que el patrón no se pase de frenada y haga que el barco de una voltereta. En el caso de «Oracle», más de lo mismo, pero en vez de ciclistas han contratado a varios Conan el Bárbaro, para que le den vueltas y vueltas a los molinillos. ¿Esto es vela? A mi no me gusta, desde luego y mucho menos cuando no sabemos casi nada de lo que se cuece en los equipos. Verlo por televisión, cuando Teledeporte no tiene cualquier chorrada para emitir, es muy espectacular, pero solo eso y cuando hay viento. Si los «foils» no funcionan y no se ponen los catamaranes a levitar, las regatas son más aburridas que la televisión en los fines de semana.
Ojalá acabe pronto esta manera de competir, porque sino llegará un día que los barcos irán solos, sin tripulantes ni patrón y serán gobernados desde los pantalanes con un radiocontrol. ¿Eso es lo que queremos?
Benditos sean aquellos monocascos que disputaban un «match race» con más de diez viradas por tramo en los que primaba la inteligencia del hombre.