Pedro Sardina - Virando por estribor
22 millones de euros es una pasada
A Ximo Puig le han vendido el «tranvía de la Malvarrosa»
La Generalitat Valenciana está a punto de firmar con la Volvo Ocean Race un nuevo contrato que abarcaría dos salidas más de la vuelta al mundo con escalas, tripulación y ayuda exterior. Dos salidas a 22 millones de euros por «cabeza». Analizando las tres salidas que se han realizado ya desde Alicante, y en las que Gerardo Camps mintió como un bellaco cuando recalcaba en todas las ruedas de prensa que eran unos eventos que a Valencia no le costaban nada, el balance recae con mucho a favor la Volvo Ocean Race y los números que sacó la Generalidad son muy rojos y falsos.
Algunos estómagos agradecidos, que se han estado beneficiando económicamente de esas salidas, nos apuntan con muchas dosis de demagogia que es muy bueno para España y sobre todo para la Comunidad Valenciana porque aumentaría el PIB y los puestos de trabajo.
Hay que decir, que trabajos directos se generan muy pocos porque hasta ahora, la Volvo Ocean Race se ha limitado a contratar personal extranjero, que habría que ver si ha cotizado, al menos, en España, y muy contados recursos humanos españoles.
"La Vendé Globe entera vale 10 millones de euros, que pagan los agricultores franceses. ¡Eso sí es una vuelta al mundo!"
Pedro Sardina
Si 22 millones de euros se pagan por una salida de una vuelta al mundo bastante desprestigiada desde que tomó sus riendas el tal Knut, qué no habría que pagar por la salida de la regata de vuelta al mundo más importante, que no es otra que la Vendée Globe. Diez millones de euros cuesta la organización del «Everest» de la vela y, encima, no los paga el estado ni ninguna comunidad autónoma, lo hacen los agricultores de la región francesa de la Vendée. Un ejemplo de organización que es capaz de congregar en un pequeño pueblo como es Les Sables D’olom a más de un millón de personas al día durante una semana en la que el pueblo vive para la regata.
El socialista Ximo Puig, al que tanto se le llena la boca de improperios contra los ricos, ahora dice que la Volvo Ocean Race es una regata popular, que el pueblo quiere tener en su ciudad.
Habría que decirle al President que o está mal asesorado o Mark Turner, gran empresario de la vela mundial, le ha vendido el famoso «Tranvía a la Malvarrosa». Ni la Salida de la Volvo Ocean Race vale 22 millones de euros, ni genera puestos de trabajos ni llena la ciudad ningún día que no sea el de la salida, en esta ocasión hacia Lisboa, verdadera ciudad de comienzo de la regata.
Hay que añadir al debe, que a ningún equipo le gusta navegar por las aguas del Mediterráneo, porque para ellos es un mar gafe y sin emoción deportiva.