Muguruza: «Me metía mucha presión e iba en mi contra»

Garbiñe Muguruza viene determinada a hacer un gran papel en Madrid. Por su parte, al menos, no quedará, advierte. Porque lleva ya unos días aclimatándose a las condiciones del Mutua Madrid Open después de retirarse en octavos de final del torneo de Charleston por unas molestias en la pierna izquierda. «Estoy mejor. He intentado entrenar y descansar, aunque es difícil porque no hay mucho tiempo», admitía la tenista, 13 del mundo, en su primera intervención ante la prensa en Madrid.

Se enfrenta en primera ronda a Sloane Stephens , con quien tiene un cara a cara igualado dos, pero a Muguruza siempre le han venido bien los retos. «Hemos jugado varias veces y es un muy buen partido de primera ronda », expuso. Admite también que Madrid no es una plaza fácil para ella, pues no ha superado nunca la ronda de octavos. Pero este 2021 es especial y quiere probarse de nuevo. «Ha sido por un cúmulo de cosas. Son las expectativas que tengo , que me pongo yo de querer hacerlo muy bien. O que mi juego no acaba de encajar. He venido antes para poner algo más de mi lado. ¿Será este año que juegue bien? Siempre pienso eso cada vez que vengo. Y este año pienso igual. Me quedan unos días para el primer partido y entrenaré lo mejor posible».

También, indica, arrastra una muy buena dinámica que lleva poniendo en práctica desde hace tiempo. Le ha llevado a sumar 21 victorias desde principio de curso , más que nadie, a alcanzar dos finales (Yarra Valley y Catar) y a sumar su primer título en Dubái. Primero tuvo que cambiar el chip mental. «Creo que hubo un cambio cuando ya me sentí que 'vale, me esta afectando mucho'. No quiero que suene muy dramático, pero cuando ya lo pasaba muy mal en pista y me decía 'no hace falta castigarse tanto , sufrir tanto, pasarlo tan mal'. Empecé a decirme 'que salga lo que tenga que salir'. Soy la primera que me meto presión y llegó un punto que era tanta que me iba en contra. Si entreno bien ya llegará el momento. Simplemente fue bajar la expectativa, seguir trabajando, ser más humilde cuando no salen bien las cosas», analizó. «Estoy más relajada, menos preocupada por si juego bien o mal . Si tengo un día malo no me asusto o pierdo el control de mis emociones. Lidio con lo que tengo».

Se iría de Madrid satisfecha cuanto más lejos del torneo llegue. «Aquí he tenido buenos partidos y se me han escapado otros, por 7-5 en el tercer set, o 6-4. Intentar llegar lejos. Es lo que pretendo».