Kyrgios presta su coche de 300.000 euros a un amigo y termina estrellado

Otra más de Nick Kyrgios . El tenista australiano, alejado de las pistas hasta el año que viene tras la sanción que la ATP le impuso –jugó por última vez en el Open 250 de Zhuhai, y perdió en primera ronda contra Andreas Seppi–, se recupera de una lesión en el hombro derecho. No jugará en Asia y tampoco en Viena o París-Bercy. Entretanto, ha roto uno de sus juguetes, valorado en unos 300.000 euros.

Kyrgios, que tendrá que estar 16 semanas sin competir si reincide en comportamientos recientes tales como romper raquetas, insultar (e incluso escupir) al árbitro o menospreciar a la ATP, prestó su coche, un Dodge Challenger SRT Demon , a uno de sus mejores amigos en Canberra, su localidad natal. El automóvil estaba a su nombre, así que tuvo que ir él mismo a declarar ante la policía después de que su colega lo estrellase.

El tenista tratará ahora de pasar algo más desapercibido antes de que tenga que volver a darle a la raqueta, previsiblemente el próximos mes de enero en su país, Australia, para el primer Grand Slam de la temporada. Como mucho, jugaría la Copa del Mundo de la ATP, a principios de año.