Dos descendientes de un perro robado en Sevilla no competirán en el campeonato de España de galgos

El Campeonato de España de Galgos podrá celebrarse finalmente este sábado en Nava del Rey (Valladolid). El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) ha inadmitido los recursos presentados por un galguero extremeño y otro sevillano para que se suspendiera la prueba y contra la descalificación para ese campeonato de dos perros - «Sola II de los Rodríguez» y «Fantasía de Luciano de la Cava»- que eran descendientes de «Chapapote», un can robado en Sevilla en 2008. La búsqueda de ese galgo sevillano desencadenó en 2013 una operación de la Guardia Civil que destapó una red dedicada al robo de galgos en Andalucía y Extremadura, y en la que fueron detenidas un total de 8 personas e imputadass 29 en un caso que investiga el Juzgado de Instrucción 1 de Carmona.

«El Tribunal Administrativo del Deporte acuerda inadmitir los recursos presentados por D. Jose Barroso Jimenez y D. Juan Francisco Rodríguez Calderón , contra la ejecución de las resoluciones del Comité de Competición de la Federación Española De Galgos», señala en un tuit la Federación Española de Galgos. Federico Murillo, presidente de la Federación Extremeña de Galgos, ha declarado a ABC que en la casa que tiene en Extremadura Juan Francisco Rodríguez Calderón, dueño de la galga «Sola II de los Rodríguez», apareció en 2013 Chapapote y su sobrino, Melitón Escudero, está imputado en el caso».

Los dos galgueros habían recurrido ante el Tribunal Administrativo del Deporte la descalificación de sus canes para competir en el Campeonato de España de Galgos y pedían además la suspensión de esa prueba en tanto no se adoptara una decisión. El sevillano José Barroso Jiménez, propietario de «Fantasía de Luciano de la Cava», y el extremeño Juan Francisco Rodríguez Calderón alegaron que ellos inscribieron a sus galgas en el Libro de Registro de Orígenes y nadie les había avisado de que eran nietas de «Chapapote». Asimismo, han señalado que otros descendientes del can sustraído están compitiendo en otros campeonatos, a lo qu e Vicente Casado, directivo de la Federación Española de Galgos, ha contestado que «eso han dicho ellos pero no se han demostrado sus acusaciones».

Finalmente, el TAD ha sido rápido en su decisión y ha dado la razón a la Federación Española de Galgos , que descalificó a los canes por ser nietas de «Chapapote». Gracias al Libro de Registro de Orígenes ha podido comprobarse que esos perros eran descendientes del perro robado, ya que a todos los finalistas se les hace una prueba de ADN. Vicente Casado ha pedido a los galgueros españoles «que se conciencien de que si un perro está desactivado, como lo fue Chapapote, todos sus descendientes no podrán competir»