Marcos, la última perla de la estirpe Llorente

La irrupción de Marcos Llorente aprovechando la ausencia por lesión de Casemiro sacó el lado más nostálgico del madridismo, enamorado de una saga que no tiene fin. Paco Gento, actualmente presidente de honor del Real Madrid, y único jugador de la historia con seis Copas de Europa, es el tío de Joe, Toñin, Paco y Julio, cuatro brillantes deportistas ligados a éxitos mayúsculos del club blanco. Marcos, es hijo de Paco, y también de María Ángela, hija de Ramón Moreno Grosso , mito del Real Madrid de los sesenta y setenta.

Los dos primeros fueron jugadores de baloncesto. Toñín fue uno de los mejores bases del basket nacional, aunque una serie de infortunios le llevaron a no poder debutar con el primer equipo del Real Madrid. Lo hizo a los 38 años , en su última campaña como profesional. Su hermano Joe sí que llegó a la cima blanca, conquistando, entre otro títulos, una copa de Europa, una Copa Korac, dos Ligas o una Copa del Rey. Además fue medalla de plata con la selección nacional en Los Ángeles 1984.

En el fútbol, fueron Paco y Julio los que durante la década de los ochenta y noventa brillaron en el equipo de fútbol. El primero, ganó tres Ligas, dos Copas y cuatro Supercopas de España, siendo un extremo de gran zancada y habilidosos regate, que le convirtió en una pieza clave en ese Real Madrid de la Quinta del Buitre. Su hermano Julio fue un lateral y, en ocasiones, pivote, que también despuntó en el club de Concha Espina, aunque solo estuvo un par de temporada en el primer equipo, suficiente para ganar dos Ligas, dos Copas y una Supercopa de España.

Ahora el turno le ha llegado a Marcos Llorente , que tras una temporada montado en la montaña rusa de la confianza de sus entrenadores, da el salto al Atlético de Madrid para contar con minutos y demostrar su valía. Para Lopetegui no contaba pero con la llegada de Solari se descubrió como un centrocampista muy válido. Sin embargo, la salida del argentino y el regreso de Zidane al banquillo blanco le devolvieron al ostracismo.

Cansado de la falta de minutos pidió salir traspasado, no quería más cesiones como la que le descubrió con la camiseta del Alavés. Y el equipo elegido es el Atlético. Con Simeone y la camiseta de rayas tendrá en su mano está seguir la estirpe de los Llorente-gento-Grosso, una saga sin fin.