Real Madrid
Un Madrid a prueba de bombas
l líder cierra el año con una renta enorme sobre sus perseguidores después de superar numerosas adversidades como la plaga de contagios de los últimos días
![Los jugadores del Real Madrid celebran la victoria en San Mamés](https://s2.abcstatics.com/media/deportes/2021/12/23/courtois2-U11716564304NQT-1248x698@abc.jpg)
Para despedir el año, un escenario inesperado, tan rápido va el Real Madrid que cuesta adivinar algo de emoción en esta Liga. Le persigue el Sevilla, a ocho puntos y con un partido menos, y lejos, lejísimos, andan moribundos el Atlético de Madrid (a 17) y el Barcelona (18), enemigos habituales y siempre en la terna de candidatos a un título que parece sentenciado. Principalmente porque los blancos exhiben un poderío asombroso (14 triunfos, cuatro empates y solo una derrota), pero también por la incapacidad de estos gigantes, que parecen haber dimitido en Navidad. Con todo a favor, el Madrid respira porque tiene un margen considerable y esa renta le permitirá gestionar el invierno, con un calendario extenuante entre Liga, Copa, Supercopa y Champions.
Es un líder a prueba de bombas, si bien entienden desde Valdebebas que llegará algún momento crítico a lo largo de la temporada. De momento, se puede decir que la fórmula de Carlo Ancelotti ha salido de maravilla, y eso que se han sucedido múltiples contratiempos en forma de lesiones o contagios. En la última semana, el coronavirus atacó al vestuario (Carvajal, Alaba, Casemiro, Modric o Rodrygo no estuvieron en Bilbao), pero nadie buscó una excusa de más y se despidió 2021 con una victoria de prestigio en San Mamés, una plaza de primera para dar un golpe casi definitivo al campeonato.
El Madrid vive tiempos felices, Navidad tranquila en contraste con los vaticinios agoreros del verano. Llegó David Alaba , que estaba fichado meses atrás porque terminaba contrato con el Bayern, y se ilusionó tanto el personal con Kylian Mbappé que la contratación relámpago de Eduardo Camavinga sonó a medio broma, diluvio de memes y chanza en las redes. Sin embargo, el primer trimestre se ha resuelto con una muy buena nota y casi todo son excelentes noticias, subido el equipo a la chepa de Benzema, Vinicius y compañía.
Con el liderazgo del francés y la irrupción asombrosa del brasileño, el Madrid ha solucionado, al menos momentáneamente, su mal endémico con el gol, disparados los delanteros con 20 (quince en Liga más cinco en Champions) y 12 tantos (diez en Liga y dos en Europa) respectivamente. Pocos delanteros son tan poderosos como lo es ahora Benzema, cuya ascendencia en el equipo es total, y nadie tiene la confianza que con el tiempo ha adquirido Vinicius, parte de ese reconocimiento tiene que ser para Ancelotti. Además, Courtois está en un momento de forma espléndido y Casemiro, Kroos y Modric se empeñan en desafiar a todo aquel que les mide en función de lo que marca su DNI, en especial a los dos últimos. Y puestos a ver el vaso medio lleno, hay ratos que rescatan la buena versión de Marco Asensio y Eden Hazard lleva dos partidos casi completos. «Sí, ha vuelto», exclama Ancelotti, empeñado en redimir al belga después de un calvario interminable de lesiones que le ha colocado en el mercado.
Calendario trepidante
Se recuperan los contagiados por coronavirus y todo parece indicar que el entrenador contará con todos sus hombres para el primer partido de 2022, domingo 2 de enero en Getafe. Ese mes es especialmente importante para el cuerpo técnico y así se lo ha hecho saber a toda la plantilla, pues será más necesaria que nunca la segunda unidad. Hay Copa del Rey (Alcoyano, la noche de la cabalgata) y el Madrid recibe el sábado 8 al Valencia y luego disputará la Supercopa de España en Arabia Saudí, emparejado con el Barcelona en semifinales (la otra enfrenta a Atlético y Athletic).
Sin apenas recurrir a las rotaciones, Ancelotti, al que no se le puede negar que la apuesta le ha salido muy bien, al menos de momento, planifica el calendario con la mente puesta en el 15 de febrero, fecha en la que visitarán el Parque de los Príncipes para disputar la ida de los octavos de final de la Champions contra el PSG. Muy pocos contaban con el Madrid para hacer algo en Europa, pero la tendencia de los blancos obliga a tenerles en cuenta incluso ante un duelo tan exigente como el que tendrán con los franceses, constelación de estrellas desperdigadas que brilla incluso menos desde que llegó Messi. Llegados a este punto, a Ancelotti le quedan pocas tareas por resolver: si acaso, devolver la pasión por el fútbol y por el Madrid a Isco o a Bale, pero eso ya es otro cantar.