Fernando Álvarez Penalva. Nadador del Club Natación Cádiz
«Volvería a repetir mil veces aquel minuto de silencio» por las víctimas de los atentados de Barcelona
El veterano nadador rememora aquel homenaje tras los atentados de Cataluña y señala: «Sería una buena señal no tener que hacer nunca más ese gesto»
«Agradezco que Cádiz reconozca mi labor, pero la natación gaditana también necesita que se cumplan sus reivindicaciones», apunta
Más de tres meses han pasado ya desde que Fernando Álvarez Penalva se convirtiera en protagonista inesperado en el Mundial Máster celebrado en Budapest . Aquel mes de agosto, cuando la desolación estaba muy presente por los atentados yihadistas acaecidos en Cataluña , este veterano nadador se convertía en héroe olímpico con un gesto que siempre quedará en el recuerdo.
Este nadador del CN Cádiz (que ha inoculado a su hija y a su nieta su amor por este deporte) representaba a España en la cita internacional y solicitó a la organización que guardara un minuto de silencio por respeto a las víctimas de los trágicos atentados. La FINA (Federación Internacional de Natación), sin embargo, se negó. En cambio, él se quedó parado durante un minuto mientras los demás competidores avanzaban en la prueba de 200 metros . Luego se lanzó al agua y se ganó el respeto y la admiración de todos.
A fin de cuentas, un acto que, aunque pueda parecer simple, no lo es. A sus 72 años se ha convertido en protagonista y Cádiz, su ciudad, no quiso olvidar la relevancia de su gesto en los Premios Ciudad de Cádiz de Deportes 2017 . De hecho, Fernando Álvarez Penalva fue uno de los finalistas en la categoría que destacaba al 'Mejor Deportista'. El ganador fue Carlos Coello.
–Siempre es reconfortante recibir el reconocimiento de la ciudad de uno, ¿no es así?
–Efectivamente. Estoy muy contento por el reconocimiento. Con él también se valora la labor de la natación en la ciudad y eso es señal del buen trabajo que se está realizando.
Ahora bien, también destaco la oportunidad que tuve de hablar con el edil de Deportes (Adrián Martínez de Pinillos) para exponerle los problemas que tenemos con la escasez de calles a la hora de practicar este deporte. Veo positiva esta primera toma de contacto, aunque ya nos reuniremos para tratar de solucionar el problema.
–¿Son muchos los inconvenientes que hay que solucionar?
–Sí. Sin ir más lejos, nuestro equipo ha crecido y en Masters se ha pasado de un único nadador (mi caso) a unos 70 y todo ello con reducción de calles. Coincidimos 30 nadadores en una misma calle y existe riesgo de colisión, de manera que no podemos entrenar en distancias más largas de 25 metros y eso va en detrimento del nivel de un equipo que piensa volver a la elite andaluza, situándose entre los cinco primeros clasificados a nivel autonómico.
–Sin lugar a dudas, inconvenientes para desarrollar un deporte que en la Tacita de Plata está dando unos resultados enormes...
–La labor de los dos equipos de Cádiz (Club Natación Cádiz y Club Natación Bahía de Cádiz) es muy buena y el ambiente es excelente. El futuro está garantizado con una buena cantera en un deporte que aporta formación en el deporte y más allá de él. Ahora bien, el principal problema, lo reitero, es el espacio existente y eso repercute de manera negativa en los masters. Por lo tanto, aprovecho este medio para pedirle al alcalde de Cádiz que entre todos solucionen el problema de las calles.
–Echando la vista atrás, ¿qué es lo que más le impresionó después de su famoso minuto de silencio en Hungría?
–Recibí numerosas felicitaciones. De todas ellas me quedo con una que recibí allí cuando un nadador sueco salió de la piscina de entrenamiento y llorando me felicitó junto a su mujer. Yo le abracé para no empezar a llorar. Me emocionó muchísimo.
No fue el único momento inolvidable. Tampoco puedo olvidar cuando nuestro entrenador llamó a los más noveles para explicarles mi gesto. Recibí un cariño inmenso y eso, irremediablemente, llega y toca la fibra sensible.
–¿Esperaba que su acto tuviese tal repercusión?
–Para nada. No esperaba nada de eso. Fue algo personal por la desconsideración con las víctimas, sus familiares, los catalanes, el resto de los españoles y conmigo mismo. Ya en frío me sorprendió la reacción de la gente. ¿Cómo puede ser? Me sorprende porque es algo que debería ser normal.
–¿Cómo fueron esos días posteriores al minuto de silencio?
–Lo positivo es el reconocimiento hacia las víctimas y eso es lo que verdaderamente importa, aunque todavía estoy abrumado porque me han llamado desde cualquier rincón del mundo. Desde Australia y Nueva Zelaada hasta Japón y Estados Unidos. También desde la Venezuela de Maduro... Además he puesto de acuerdo a todos los partidos políticos en una cuestión y eso ya es un auténtico éxito en los tiempos que corren.
–¿Volvería a hacerlo?
–Tengo clarísimo que volvería a hacerlo cien y mil veces. Pero dejo claro un asunto: no busqué los focos ni tampoco los esperaba. Todo llegó de manera repentina. Eso sí, espero que desde mi club no den mi teléfono y me dejen disfrutar de mi minuto de silencio en paz (entre risas). Pero mejor aún será que no se tengan que hacer más minutos de silencio por esos motivos.
–Siempre es reconfortante recibir el reconocimiento de la ciudad de uno, ¿no es así?
–Sí. Recibí una notificación de la FINA dándome las condolencias y asegurándome que harían un minuto de silencio en la fiesta final del campeonato, cita a la que no pude acudir.
–¿Habrán aprendido la lección?
–Sí, sin dudas. Tengo esa certeza. Aquellos días bombardearon a la FINA con insultos e improperios a través de las redes sociales y seguro que han aprendido la lección. No actuaron bien por desorganización en ese momento, no por mala fe. Era algo que tenía que haber solicitado la FINA, no el deportista. Por ejemplo, no veo a Sergio Ramos solicitar un minuto de silencio por un acto terrorista, pues eso ya lo hace el organismo encargado.
–¿Le pide algo especial a 2018?
–No hacer otro minuto de silencio. Será la mejor señal. Más allá de eso, y a nivel individual, también me gustaría no tener lesiones porque por una de rodilla y otra de muñeca no pude acudir a los Campeonatos de Andalucía y España, y en el Mundial no pude estar al cien por cien. Disfrutar de la piscina es lo que me da la vida.
A fin de cuentas, la natación es algo muy importante y mi deseo es que la natación sea una asignatura obligatoria en la enseñanza. Lo digo porque es lamentable que existan niños que no sepan nadar y realmente deben saber hacerlo. Es un asunto de importancia social. En ese sentido nos queda aprender de otras comunidades autónomas como Canarias y Cataluña.