Crónica
España - Escocia: Baile de oro en la Cartuja para dar un paso más al Mundial (8-0)
Nueva exhibición de las internacionales en Sevilla para acercar la clasificación al gran torneo de selecciones
Acaban de salir del estadio con todo el cariño hecho aplauso en Sevilla. Eran unas 23 en total, a excepción de Mapi, que se lesionó con Islas Feroe. Se decían futbolistas, pero deben ser arqueóloga s . Ninguna otra cosa podría explicar cómo hallaron, ellas, competitivas picapedreras de un billete mundialista que ya casi acarician, un enorme tesoro de 32 centímetros de alto, 23 centímetros de largo y de ancho y poco más de siete kilos de peso. Son las dimensiones exactas que tiene la justicia deportiva. Y qué gran verdad es esa de que a veces el mundo se puede coger con las manos de una mujer. Para algunos es sólo un balón, el de oro, que acapara portadas y se lleva los titulares más jugosos. Para Alexia Putellas y sus compañeras supone la mayor reivindicación del fútbol femenino a lo largo de su historia, que cada vez se cuenta más y mejor. Un baile redondo . Aquella pelota dorada durmió en Triana y se levantó en la Cartuja, que tuvo uno de los mayores honores de este deporte en lo que va de siglo para ser testigo de la goleada de España frente a Escocia , la segunda clasificada del grupo. Hacer 16 victorias de 16 posibles. Y acercarse más al Mundial.
Porque una campeona lo es siempre: entrenándose ayer con el grupo, volando a París, saludando a un tal Mbappé que de momento sólo presenta al que lo gana, y volviendo con el vestido, sin fiesta pero con el respeto de oro intacto a un hotel emocionado. Porque ser la mejor en algo debe ser el oficio más extenuante y gratificante que existe. Hoy fue titular, junto a las tres otras nominadas a la mayor distinción individual, por decisión de un Jorge Vilda que le dio descanso inicial a Esther. No hay premio, por cierto, todavía, que merezcan las manos de Virginia Torrecilla , un alma que volverá más pronto que tarde a su vestuario. Y cuyo dorsal volvió a brillar en el coliseo sevillano.
Ni las gaitas escocesas pueden silenciar lo que fue un auténtico grito de las cientos de personas que no fallaron este martes a su selección: estas internacionales son invictas y llevan cero goles en contra porque es justo lo que su fútbol merece. La superioridad del que no sólo es imbatido, sino que se siente invencible aunque eso sea imposible en cualquier deporte. Tan excelente como Amaiur , que centró y Jenni sacó el tacón a pasear para tener la primera. Obligaba la presión española a jugar directo a las escocesas. Ahí es donde las de Vilda se sienten cómodas, crean espacios y circunstancias y se ponen a repartir pases en diagonal, en corto o en largo. Sólo Harrison inquietó con un disparo al larguero por un fallo defensivo. Sería sólo un despiste entre el dominio absoluto. Por el mismo flanco diestro llegó el peligro a la segunda jugada de un córner. La aprovechaba Amaiur con un testarazo brillante con el que endosar el primero de la noche. El décimo a su cuenta clasificatoria. Brazos al cielo de la grada sevillana, repleta de alegría, porque España ya doblegaba a Escocia en juego y en resultado gracias al tanto de la realista. Australia y Nueva Zelanda deben tener vuelos con escala en Sevilla el año que viene.
Imparables en Sevilla
Aitana sacó un duro disparo que logró repeler Alexander. Y luego Amaiur dio el susto a las de Pedro Martínez con una doble oportunidad. «¡A por ellas, oé!» , y a por ellas que fueron. Concretamente Mariona , que remató el centro de Ona, primero, y luego sacó un latigazo imparable a media altura que hizo el segundo, cortando el frío de cuajo. Una incomunicación defensiva en el área Escocia provocó el tercero, que lo firmó Aitana, tan lista como siempre para tumbar las pocas esperanzas ya del rival de meterse en el encuentro y segando toda reacción antes del descanso.
Fue Escocia quien quiso cambiar el ritmo con dos cambios, pero cuando la calidad sale a relucir , a veces no hay más que agachar la cabeza y tratar de dignificar el escudo. Mariona se sacó un gran disparo a bote pronto que salvó Lee, tan providencial como la pierna de Boyle cuando Alexia ya tenía superada a la guardameta escocesa. Sí consiguió España finalmente que subiese la cuarta guinda al marcador, cuando Amaiur rubricaba el doblete rascando un gran balón de Alexia. Invitó al baile Aitana , que tiró un túnel, arrojó un bellísimo eslalon entre dos defensoras y sacó el chut, repelido por la arquera en primera instancia. No en la segunda. «¡Alexia, Balón de Oro, Balón de Oro...!» , gritaba una enfervorizada Cartuja. Y la gran líder actuaba para hacer el sexto culminando una contra. Jenni Hermoso armó un bonito disparo a diez del final para poner el séptimo puñal. Un puñal de plata, como su trofeo ayer. Y el octavo gol se quedó clavado en la cepa del poste tras otro disparo de Hermoso. Pero ahí estaba Mariona para anotar el último y cerrar una noche maravillosa para remarcar el camino al Mundial de un grupo de oro que sigue bailando en la Cartuja.