Fútbol
De seleccionador masculino a femenino: la nueva aventura del trotamundos Renard
El dos veces ganador de la Copa África, quien provocó con Arabia Saudí la única derrota de Argentina en Qatar, dirigirá a la selección francesa femenina
Así es Hervé Renard, el autor del milagro de Arabia Saudí ante Argentina
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El camino profesional de un hombre que, como los exploradores de siglos pretéritos, pasó media vida descubriendo lugares lejanos guarda un recodo en casa. Hervé Renard, después de construir su personaje en África, donde conoció el triunfo internacional, y sorprender a propios y extraños ... en el Mundial de Qatar al liderar desde la pizarra la victoria de Arabia Saudí ante Argentina, firmará con la selección femenina de su país natal, Francia. A falta de confirmación oficial, el de Saboya revelará en el banquillo galo a Corinne Diacre, quien fue destituida el pasado nueve de marzo después de que trascendieran ciertas desavenencias con varias de sus jugadoras.
A cuatro meses del Mundial de Australia y Nueva Zelanda, la que será su segunda Copa del Mundo en menos de un año, Renard añadirá otra mueca a su extensa amalgama de experiencias como máximo responsable de selecciones nacionales. Sin embargo, pese a haber entrenado en tres continentes, esta será su primera toma de contacto con el fútbol femenino. Un reto capital en un juego que, a pasar de tener la misma base, difiere física y, por ende, tácticamente al masculino, el fútbol donde Renard ha desarrollado toda su carrera. Además, por primera vez, el galo dirigirá a una selecciones con opciones reales de ser campeona mundial.
Pero si su entrada en el fútbol femenino llama la atención, también merece un aparte el aspecto monetario. Porque mientras que su sueldo en Arabia Saudí superaba los 300.000 euros mensuales, el montante recibido por su predecesora Diacre no alcanzaba el medio millón anual. Desde Francia apuntan que el ex del Lille rebajará considerablemente sus expectativas salariales para poder dirigir a la semifinalista de la pasada Eurocopa.
Trotamundos
«Haber sido el entrenador de la selección nacional de Arabia Saudí es un gran orgullo para mí. Desde agosto de 2019 tuve la oportunidad de ser parte integral de la vida de este hermoso país. He visto a este equipo crecer a mi lado y lograr un mundial fabuloso. Nunca olvidaré la victoria contra Argentina», escribió ayer Renard en sus redes sociales como despedida del combinado saudí, con el que tenía contrato hasta 2027.
Fue precisamente con los de Oriente Próximo, en el pasado Mundial de Qatar, donde su apellido sonó con fuerza globalmente. Arabia Saudí remontó el gol inicial de Messi, logró el triunfo más importante de su historia y amargó el debut del a la postre campeón. Fue tal el arrebato de alegría en tierra saudí que el rey del país, Salmán bin Abdulaziz, convirtió en festivo el día posterior al partido. Aquel fue un oasis de éxtasis y pronto los de Renard cumplieron las expectativas y no se clasificaron para la siguiente ronda. Es más, desde que derrotaran a los de Scaloni, los asiáticos han perdido seis de los siete partidos que han disputado. Una deriva lógica al nivel de sus futbolistas.
Previamente a ser protagonista por un día en Qatar, Renard fue un entrenador de culto en África. El galo fue el primer técnico en ganar dos Copas África con dos selecciones diferentes (Zambia, en 2012; y Costa de Marfil, 2015). Igualmente, en varias etapas intercaladas a su éxito africano, Renard provó las mieles de la Ligue 1. Pero ni en Lille ni en Sochaux encontró su lugar. Ahora, a sus 54 años, este trotamundos del fútbol internacional ha encontrado una empresa emocionante en casa.
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