Brasil pone fin al sueño de la sexta Copa del Mundo
Todo el pueblo brasileño lamenta la derrota y reabre viejas heridas del pasado
Brasil lloró este viernes la derrota frente a Bélgica en cuartos de final del Mundial de Rusia de 2018 y, como destacó la prensa del país suramericano, puso «fin al sueño» de alcanzar en este campeonato el sexto título de su historia.
Lance, uno de los principales diarios deportivos de Brasil, titula en internet: «Fin del sueño». El diario digital Globosporte habla de la «vuelta a casa» de la «Canarinha» mientras que el generalista O Estado de Sao Paulo apunta el dedo, hacia Fernandinho. «Uno de los villanos del 7-1, Fernandinho se marca un gol en propia puerta y decepciona una vez mas» resalta O Estado de Sao Paulo en su versión digital.
Folha de Sao Paulo dio protagonismo en su porta a una foto de Neymar tirado en el suelo, con gesto de dolor, criticó el «bloqueo» de la selección brasileña y sus dificultades para reaccionar tras los dos primeros goles de los belgas.
«La derrota podría ahber sido mayor y tenía pinta de 7-1 , marcador de la vergonzosa derrota ante Alemania en el Mundial de 2014», dice Folha.
El portal de noticias OUL sentenció en su portada que era posible «ir más allá» : «Brasil pierde 2-1 ante Bélgica y ve como el sueño del título acaba en cuartos».
«Brasil le dice adiós a la Copa», titula 'O Globo', junto a una fotografía de Neymar cubriéndose el rostro. «El sueño del hexa queda aplazado otra vez: Bélgica vence por 2 a 1 y jugará las semifinales contra Francia», apunta.
La prensa brasileña acompañó el sentimiento de miles de aficionados que rompieron en lágrimas con el pitido final que aliminó a Brasil de la competición, de la que guarda cinco títulos mundiales. «Yo estoy destrozada, porque estábamos casi ahí, llegamos muy cerca. Es difícil creerlo», afirmó Arielly Oliveira, eficionada que siguió el partido desde un bar en Sao Paulo, que al igual que el resto de ciudades brasileñas paró para asistir al encuentro.
Rafael Calgaro, otro hincha que acompañó a su equipo, expresó su «decepción total»: «Había un buen equipo para ganar» y Brasil «no hizo nada»