FÚTBOL
Muere Carlos Matallanas, ejemplo de la lucha contra la ELA
El periodista, analista y exjugador fallece a los 39 años de edad tras más de un lustro de dura batalla contra la enfermedad
Hace apenas unos días que la plantilla del Cádiz CF rendía homenaje a Carlos Matallanas, fiel referente del lema 'La lucha no se negocia' (LLNSN), el mismo que siempre quedará vinculado al Cádiz CF de Álvaro Cervera. Una filosofía de vida que va más allá de los rectángulos de juego y que son muchos los que la llevan a cabo.
Este 9 de marzo, ni una semana después de aquello, Carlos Alberto Gómez Matallanas ha fallecido a los 39 años de edad.
El que fuese jugador de fútbol ha dicho adiós tras varios años plantando batalla a la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), enfermedad que le fue diagnosticada hace más de un lustro.
Fue en el año 2013 cuando el madrileño comenzó a sufrir los primeros síntomas de una enfermedad que le obligaría a colgar las botas. Un año después fue el propio jugador el que anunciaba que sufría ELA. Así puso fin a una trayectoria que se desarrolló en equipos de la Comunidad de Madrid (RCD Carabanchel, Alcobendas, Santa Ana, Parque Europa, Fortuna, Puerta Bonita, Rayo Majadahonda, Pozuelo y Moscardó), antes de poner fin en tierras gaditanas como jugador del Racing Club Portuense (club que ha puesto el nombre de Carlos Matallanas a la sala de juntas) y de la UD Roteña.
Además de haber sido futbolista, Carlos Matallanas también era periodista, profesión que también lleva a cabo su hermano Javier. Y analista, misión que ha llevado a cabo inmovilizado y desde la distancia hasta los últimos días. Siempre en todos aquellos equipos en los que Mere ha dirigido en los últimos tiempos. Desde el Cádiz B hasta el Alcorcón pasando por el Fuenlabrada.
Adiós con un libro
Su último reto en esa lucha incansable fue explicarlo en su libro 'La vida es un juego (Estrategia para Mario y Blanca)'. Un libro que ya tienen la la plantilla y el cuerpo técnico del primer equipo cadista, quienes se fotografiaron con sus ejemplares tras un acto en el que el presidente Manuel Vizcaíno puso como ejemplo el pundonor del madrileño.
Carlos Matallanas, que en los últimos años ha estado viviendo en El Puerto de Santa María, al fin pudo hacer realidad uno de sus sueños. «Siempre explicaba cómo el fútbol me había formado el carácter y que esto era crucial para entender mi actitud ante la ELA», aseguraba días antes de su adiós.
Y es que como Carlos Matallanas apuntaba en su libro: «En cualquier rincón del planeta, si hay un balón, habrá la sonrisa de un niño. Esa magia no tiene precio».
Nacido en la localidad madrileña de Carabanchel hace casi cuatro décadas, Carlos Matallanas se marcha siendo un referente y un auténtico luchador. Su apuesta por la vida será recordada siempre. Descanse en paz.
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