Eurocopa

La vida en Londres del respetado capitán Azpilicueta, cicerone de España en Wembley

En la capital inglesa desde hace nueve años, el defensa juega la semifinal en casa

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La selección española no puede tener un mejor anfitrión en Wembley. Cuando César Azpilicueta bajó ayer del avión que trasladó al equipo nacional a Londres esbozó una amplia sonrisa. Estaba de vuelta en casa, pues la capital inglesa ha sido su hogar durante los últimos nueve años, una ciudad a la que ha conquistado por su carácter y que le guarda un gran respeto, tal vez más desde que el navarro levantara la copa de campeón de la Champions como capitán del Chelsea. Azpilicueta, por cierto, es el único de los españoles que podría conquistar el doblete continental con su equipo y la selección. En su misma situación hay otros seis jugadores. Todos ellos, claro está, compañeros suyos en el Chelsea: el danés Christensen, los italianos Jorginho y Emerson y los ingleses Mount, Chilwell y James.

Poco se imaginaba Azpilicueta la importancia que tendría Londres en su vida cuando firmó su contrato en agosto de 2012. Llegó al Chelsea como una joven promesa y con todo por demostrar. Casi una década después se ha convertido en un líder, un veterano con un reconocimiento especial tanto del club como de los aficionados. En su trayectoria ha tenido hasta ocho entrenadores, tan distintos entre sí como Mourinho, Benítez, Hiddink o Tuchel. Todos han contado con él. Su importancia sobre el terreno de juego ha ido acompañada de un peso cada vez mayor en el vestuario. Le gusta conciliar las distintas sensibilidades del grupo y es un excelente motivador. «Su actitud, la implicación que tiene todos los días del año, es un ejemplo absoluto para cualquier jugador joven», decía de él Frank Lampard . «Es el epítome del club. Aquel al que miran los aficionados y dicen: 'Así sentimos nosotros también el Chelsea'. Por esa razón es el capitán». Es, junto a Petr Cech, el único futbolista extranjero en jugar más de 400 partidos con el Chelsea, y los empleados del conjunto 'blue' aún recuerdan su detalle en las navidades de 2018, poco después de ponerse el brazalete. Les envió una botella de vino tinto para reconocerles su trabajo, un gesto inédito en la vida del club.

Casa en las afueras

La vida de Azpilicueta en Londres es tranquila. Vive a las afueras, cerca de Cobham , donde se encuentra el centro de entrenamiento del Chelsea. Cuando Juan Mata y Oriol Romeu jugaban en el Chelsea solían acudir los tres al centro de la ciudad. También era frecuente verlo en algún restaurante con Nacho Monreal cuando su paisano jugaba en el Chelsea . Ahora lleva una vida mucho más familiar junto a su mujer y sus tres hijos.

En Wembley, escenario de la semifinal ante Italia, y también de la posible final, ha ganado dos títulos. El primero, en 2015, fue una Copa de la Liga ganada al Tottenham. De aquel partido guarda una foto icónica junto a Hazard , gran amigo suyo, en el que ambos aparecen con las camisetas intercambiadas. También conquistó la FA Cup de 2018, poco antes del Mundial de Rusia.

Estuvo en Wembley para el debut de Luis Enrique como seleccionador, (triunfo por 1-2 sobre Inglaterra). Fue de sus últimas convocatorias antes de quedar fuera del equipo nacional por dos años. Su regreso para esta Eurocopa fue inesperado, aunque muchos lo aplaudieron. Ahora sueña con el título como el resto, aunque él incluso podría celebrarlo en el jardín de su casa.

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