Los tres increíbles récords del mago del balón holandés

No es Messi, ni Cristiano Ronaldo, ni Neymar. Nunca ganará la Champions League ni el Balón de Oro, ni ocupará portadas en periódicos de todo el mundo por lanzar un penalti de manera brillante. Pero ni siquiera los más destacados futbolistas profesionales pueden igualar la destreza técnica de Leon Walraven , un holandés de 27 años que aparece nada menos que tres veces en el Libro Guinness de los Récords. Y todo gracias a su asombrosa facilidad para dar toques con la pelota.

Conocemos a este auténtico fenómeno gracias al blog de Guinness World Records. Leon confiesa que decidió entrenar muy duro durante varios años para batir marcas mundiales «porque quería hacer algo especial». Lo ha logrado de tres maneras distintas, a cada cual más difícil . Su primer récord es el de más toques de balón con el hombro en un minuto: mantuvo el balón lejos del suelo durante esos 60 segundos dando un total de 214 toques.

No satisfecho con su primera hazaña, Walraven decidió ir a por el más difícil todavía y convertirse en el hombre capaz de dar más toques con la espinilla en un minuto . Una superficie de contacto realmente complicada, por no hablar de la incómoda postura que tuvo que adoptar para asaltar el récord. Sentado en el suelo, con los ojos clavados en el esférico, totalmente concentrado, alcanzó la impresionante cifra de 224 toques.

La afición de Leon viene de lejos. Si los dos récords anteriores los estableció el pasado 18 de agosto de 2015, un par de meses antes había obtenido su primera gran marca. Pero no por ser su estreno resultó más sencillo: el holandés dejó sin palabras a los jueces de Guinness dando 270 toques con la planta del pie en un minuto. Con la espalda sobre el suelo y las piernas en alto, pateó el cuero como si fuese la cosa más fácil del mundo.

Para establecer sus récords, Leon Walraven tuvo que utilizar un balón de talla 5 aprobado por la FIFA ; y por supuesto, sabía que si perdería su gran oportunidad si éste tocaba el suelo en cualquier momento. Aunque su idilio con la pelota ha quedado más que probada, este 'Maradona de YouTube' no se dedica al fútbol: una simple en búsqueda nos desvela que su otra gran pasión es la fotografía, como se puede comprobar en su web personal. Sin duda alguna es un tipo polifacético.