Entrevista

Rivaldo: «No se puede dejar todo para Messi»

El exjugador del Barcelona pasa revista a la actualidad del club antes del crucial duelo ante el Nápoles y habla sobre su vida en EE.UU., el Deportivo o Brasil

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Rivaldo habla hoy con la autoridad que le confiere haber portado el estandarte de un Barcelona de entreguerras, que sufría intentando clasificarse para la Champions, aliviado a la postre por aquella histórica chilena del brasileño en la última jornada de Liga ante el Valencia. Suya es la firma que luce sobre esa imagen, por más que poco tenga que ver con las exigencias que hoy atenazan al conjunto catalán, obligado a ganar ante el Nápoles (21.00 h) si no quiere volver a invocar los fantasmas que le metieron el susto en el cuerpo en el desdichado reinicio liguero. Caer eliminados supondría un aldabonazo casi definitivo para las aspiraciones de Setién como técnico azulgrana. Todo ello, además de su vida en Estados Unidos, el Dépor o Brasil, lo repasa Vítor Borba Ferreira Gomes, embajador de Betfair, en una charla telemática con ABC.

Ahora vive en Orlando.

Vine aquí con mi familia pensando en darles algo mejor a mis hijos. Estoy encantado.

¿Por qué Orlando y no volver a Brasil, o cualquier otra ciudad que no fuese esa?

Yo estaba en Brasil. En 2014, mi exmujer, que es la madre de mis hijos Rivaldinho y Tamires, murió. Fue un momento muy difícil para mis hijos. Vine a final de ese año. Ella murió en octubre, y en diciembre estaba aquí para salir un poco de nuestro país. Ellos estaban muy tristes. Mi exmujer era una persona muy alegre. Decidí traérmelos a Disney para despistarlos un poco de todo lo que han tenido que pasar. Llegamos y nos gustó. Compramos una cosa. Decidimos vivir aquí por un tiempo. Pero la vida cambia, en cualquier momento puedes irte a otro sitio. A Barcelona, por ejemplo. Pero ahora estamos muy contentos.

¿Mantiene algún vínculo con el fútbol?

No.

Imagino que la actualidad sí que la sigue. ¿Cómo ha recibido todo lo que está sufriendo el Deportivo?

Para mí es una situación difícil, porque el Dépor es un equipo al que tengo un cariño especial. Es el club que me trajo a Europa desde el Palmeiras, y con el que hice una gran temporada. Es un equipo que tuvo a Bebeto, a Donato, a Mauro Silva, a Djalminha, a Luizao, a Flavio Conceiçao, a Fran… grandísimos jugadores. Hoy se encuentra en un momento delicado, peleando para quedarse en Segunda después de todo lo que ha pasado. Yo espero que esto se pueda arreglar.

Algún partido del Barça también estará viendo. ¿Qué espera del Nápoles?

Va a ser difícil, atípico. Sin aficionados va a ser complicado para el jugador. Tendrán que entrar al cien por cien. Este tramo final de la Liga no han jugado muy bien, y el Madrid ha conseguido el título y el Barça tiene que hacer algo, no se puede quedar fuera de la Champions. Le vale el cero a cero, pero hay que intentar ganar para cambiar la situación.

Usted que pudo palpar lo que es el club por dentro, ¿qué piensa de las imágenes que se vieron recientemente en las que jugadores tenían desaires con Setién y Sarabia?

Es algo que pasa en el fútbol. En el Barcelona siempre hay momentos donde se habla de cosas de dentro del vestuario. Aunque pasa en cualquier equipo grande, también en Brasil. Son cosas que, cuando suceden, hay que intentar arreglar lo más rápido posible para conseguir victorias que lleven a títulos. Si no, a la prensa le gusta alimentar la polémica. Pienso que sólo se tendría que hablar de fútbol, no tanto de vestuario o líos entre jugadores o entrenadores.

Viendo las dificultades que tantos jugadores de primer nivel vienen teniendo para encontrar un encaje en el Barcelona, desde Griezmann hasta el Ibrahimovic de turno, ¿piensa que hablamos de un club donde quien no esté formado en un fútbol tan particular como el que allí se promulga tiene difícil triunfar de azulgrana?

El Barcelona siempre quiere contratar a los mejores. Para mí la culpa no es del club. A veces son jugadores de más de 100 millones de euros. Tienen que hacer la diferencia, y tener la suficiente personalidad para seguir haciendo lo que hacían en su club, que es por lo que los han fichado. Si cuando llegan se quedan tímidos con Messi, con Suárez y otros jugadores que ya son ídolos en el Camp Nou… No lo sé, no sé qué es lo que pasa, pero es cierto que hay muchos que no alcanzan ese cien por cien. No se puede dejar todo para Messi. Este año todavía no ha sido campeón de nada, aunque haya hecho no sé cuántas asistencias, no sé cuantos goles. Pero jugadores que han sido fichados por mucha pasta este verano también deberían estar en esos números para que en el momento en que Messi no esté bien sean capaces de marcar la diferencia. Es un tema de personalidad.

Usted vino a España con 24 años. Ahora vemos cómo los jugadores de Brasil salen del país siendo niños, ahí están Vinicius, Rodrygo o Reinier. ¿No cree que va todo demasiado deprisa?

Está claro que el jugador con 17, 18 o 19 años va a querer ir a España. También sus padres y sus representantes. Es malo para el fútbol brasileño. Yo me quedé allí hasta los 24, y por eso me respetan, por lo que hice en Corinthians y Palmeiras. Hay muchos jugadores que no tienen esa posibilidad. Con una temporada, los empresarios enseguida los traen para España. Es bueno para ellos porque tienen futuro. En cambio, va contra los jóvenes de las canteras de los clubes que fichan. El español que está en la cantera dirá, ¿qué estoy haciendo aquí? En el Madrid o el Barça, con la estructura que hay, tienen capacidad para sacar grandísimos jugadores, sin necesidad de traer tantos jóvenes de Brasil.

El suyo está siendo uno de los países más afectados por el coronavirus en América. ¿Cómo está digiriendo la gestión que Bolsonaro está haciendo de la pandemia?

No quiero hablar de ese tema. La situación es mundial, no solo de Brasil. Todavía no tenemos la vacuna, así que hay que esperar. Es complicado para todos. Yo estoy cuidando de los míos, hablando con mi madre y mis hermanas para que se cuiden de la mejor manera posible. No quiero hablar del tema político porque no es fácil, cada uno tiene una opinión y, si doy la mía, a veces las personas la interpretan de manera equivocada.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación