Seis millones para pagar favores en la territorial catalana

«El peor de todos es el catalán, porque Villar por Cataluña ha hecho lo que no está escrito en la Federación y en la Mutualidad». Estas y otras conversaciones grabadas a Juan Padrón , exvicepresidente de la Federación, en el marco de la Operación Soule , revelan el trato de favor que se otorgó a la territorial catalana durante años. Hasta el punto de que fue sin duda la más beneficiada en el desvío de fondos desde la Mutualidad de Futbolistas .

Los investigadores de la UCO cuantifican en cerca de seis millones de euros los que se detrajeron del patrimonio de la Mupresfe para tapar agujeros en Cataluña. De hecho, es el anterior gerente de la Mutualidad, José María Castillón , quien firma en 2011 con el entonces presidente de la Federación Catalana de Fútbol (FCF), Andreu Subies, un convenio a través del cual se desviaron a la delegación en Barcelona entre 2011 y 2015 un total de 3.250.000 euros en cuotas anuales de 650.000 euros al año. La justificación de estos pagos -«compensación a la FCF por gastos de gestión de cobro de cuotas de mutualistas»- no convence a los investigadores, pues este sistema de otorgar a una cantidad anual fija no era habitual en otras territoriales.

Posteriormente, se intentaron justificar estas cantidades en un programa denominado «Joc Net» (juego limpio) que en realidad terminó siendo una página web en la que se colgaban distintas informaciones. «salvo que el proyecto Joc Net tenga algún contenido desconocido por los informantes -asegura la UCO- su naturaleza y envergadura distan mucho de requerir una financiación anual de 650.000 euros».

A partir de 2016, la cantidad anual que la Mupresfe envió a la FCF ascendió hasta los 900.000 euros, y este menoscabo a las arcas de la Mutualidad hubiera seguido creciendo si el juez Pedraz no hubiera iniciado la operación Soule y posteriormente hubiera detenido e imputado al que fuera presidente de la Federación Catalana durante todo ese periodo, Andreu Subies . Pese a que ABC informó en octubre de 2017 de que la Audiencia Nacional ya investigaba el desvío de 2,6 millones correspondientes al periodo 2011-2015, Luis Rubiales decidió en mayo colocar a Subies nada menos que como vicepresidente y número dos de la Federación. En marzo de este año tuvo que dimitir, cercado por un nuevo informe que señalaba que podría haberse beneficiado personalmente de las mordidas.